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La siesta es una costumbre tan mediterránea como utilizar aceite de oliva en las comidas, y para muchas personas, especialmente deportistas, dormir un rato después de comer, no es sólo una buena costumbre, es una forma de añadir horas de sueño al día cuando no es posible dormir suficiente durante la noche, o de recuperarse de los entrenamientos intensos de la mañaña, prepararse para doblar entrenos por la tarde o descansar la mente y dividir la jornada laboral en mañana y tarde.
En nuestra cultura, la siesta puede parecer un costumbre cultural, incluso una costumbre saludable, o el yoga ibérico como la llamaba el premio Nobel de Literatura Camilo José Cela. Y así puede ser, siempre que no duermas más de una hora durante la siesta, evitando lo de pijama, padrenuestro y orinal como recomendaba el escritor novel... Al menos así lo recomienda esta investigación presentada en el Congreso European Society of Cardiology ESC 2020.
El trabajo es un metanálisis de 20 estudios publicado en la revista Sleep Medicine. Un total de más de 300.000 participantes para analizar la relación entre la frecuencia y la duración de la siesta, y la asociación con el riesgo de muerte y enfermedades cardiovasculares.
El autor del estudio, el Dr. Zhe Pan, de la Universidad Médica de Guangzhou, China ha comentado:
"La siesta durante el día es común en todo el mundo y generalmente se considera un hábito saludable. Está generalizada la idea de que la siesta mejora el rendimiento y contrarresta las consecuencias negativas de la 'falta de sueño', pero este estudio contradice estas opiniones tan difundidas".
Las investigaciones anteriores sobre la relación entre las siestas diurnas y la mortalidad o las enfermedades cardiovasculares han dado resultados contradictorios, y no tenían en cuenta la duración del sueño nocturno.
Las siestas largas pueden ser perjudiciales para la salud según este metanálisis que investiga la asociación entre la frecuencia y duración de las siestas y el riesgo de incidencia de ECV (Enfermedad CardioVascular) y mortalidad por todas las causas.
Este estudio resumió la evidencia disponible para evaluar la relación entre las siestas y el riesgo de muerte por cualquier causa y la enfermedad cardiovascular.
El análisis incluyó un total de 313.651 participantes de más de 20 estudios publicados anteriormente, en la que se estimaba que el 39% de los participantes dormía siestas.
Los resultados mostraban que las siestas largas (más de 60 minutos) se asociaron con un 30% más de riesgo de muerte por cualquier causa y un 34% más de probabilidad de enfermedad cardiovascular en comparación con no tomar siestas.
Cuando se tuvo en cuenta el sueño nocturno, las siestas largas se relacionaron con un riesgo elevado de muerte solamente en aquellos que durmieron más de seis horas por noche.
En general, las siestas de cualquier duración se relacionaron con un riesgo elevado de muerte del 19%.
La relación fue más pronunciada en las mujeres, que tenían un 22% más de probabilidad de morir si hacían siestas en comparación con las que no lo hacían, y en las participantes mayores, cuyo riesgo aumentó en un 17% de mortalidad al dormir siestas.
Los autores encontraron que las siestas cortas (menos de 60 minutos) no eran peligrosas a la hora de desarrollar una enfermedad cardiovascular.
El Dr. Pan comentó:
"Los resultados sugieren que las siestas más cortas (especialmente las de menos de 30 a 45 minutos) podrían mejorar la salud del corazón en las personas que duermen lo suficiente por la noche".
Las razones por las que las siestas afectan al cuerpo aún son desconocidas, dijo el Dr. Pan, pero algunos estudios han sugerido que las siestas prolongadas están relacionadas con niveles más altos de inflamación, lo cual es un riesgo para la salud del corazón y la longevidad. Otra investigación ha relacionado las siestas con hipertensión arterial, diabetes y mala salud física en general.
Conclusiones del metaanálisis
- 1/ La siesta prolongada de más de 60 minutos al día se asocia con un mayor riesgo de ECV y mortalidad por todas las causas.
- 2/ La duración del sueño nocturno puede influir en la relación entre las siestas y la mortalidad por todas las causas.
El Dr. Pan ha tranquilizado a los amantes de la siesta al comentar:
“Si te gusta dormir la siesta, lo que te recomienda este estudio es que lo más saludable es que la hagas de menos de una hora."
Así que ya sabes, si vas a dormir la siesta, ponte la alarma antes de caer rendido en el sofá para poder disfrutar de un sueño saludable después de comer de entre 20 y 50 minutos, no más.
Fuente:
The association between napping and the risk of cardiovascular disease and all-cause mortality: a systematic review and dose-response meta-analysis. European Society of Cardiology 2020
Association of napping and all-cause mortality and incident cardiovascular diseases: a dose-response meta analysis of cohort studies. Pan, Zhe, Huang, Mingkai, Huang, Junfeng, Yao, Zhiyuan, Lin, Zhidi. August 2020. Sleep Medicine 74. DOI: 10.1016/j.sleep.2020.08.009
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