El té blanco es una infusión procedente de la región china de Fujian y se obtiene dejando marchitar levemente las hojas de la planta camellia sinensis. Para ello, se exponen durante un breve espacio de tiempo a los rayos del sol, con el objetivo de prevenir una excesiva oxidación.
Gracias a esto, se consigue un tipo de té que, sobre todo, es muy rico en catequinas, un tipo de polifenol antioxidante que ayuda a prevenir todo tipo de enfermedades cardiovasculares, así como reducir los niveles de colesterol en sangre. En el ámbito deportivo, esta bebida favorece la regeneración muscular tras una intensa actividad física. También es una excelente forma de mantenerse hidratado y recuperar las sales minerales tras una excesiva sudoración.
¿Cómo se puede combinar el té blanco?
Si por tu parte has empezado a tomar té blanco más asiduamente y no quieres caer en la monotonía, tienes la opción de combinarlo de cinco formas diferentes:
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Té blanco con manzana asada
Puedes añadir un par de trozos de esta fruta con el objetivo de beneficiarte de su alto aporte en fibra (2,4 gramos/100 gramos), un nutriente que ayuda a tratar el estreñimiento y disfrutar de una mejor salud intestinal. También contiene potasio, un macromineral que propicia el correcto desarrollo de los músculos y las articulaciones.
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Té blanco con canela
También existe la posibilidad de incluir un par de cucharadas de canela en polvo. Esta especia reduce la tensión arterial y potencia el sistema inmunológico. Asimismo, gracias a sus propiedades antiinflamatorias, se puede tomar con té blanco para reducir la hinchazón muscular tras realizar cualquier esfuerzo físico.
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Té blanco con jengibre
Si mezclas té blanco con un par de trocitos de jengibre, podrás reducir los niveles de estrés y ansiedad, así como evitar las migrañas. Por otro lado, gracias a sus efectos termogénicos, esta combinación es capaz de metabolizar y quemar las grasas de forma más efectiva.
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Té blanco con aloe vera
El aloe vera es un tipo de planta que también encierra todo tipo de beneficios para el organismo, sobre todo si se mezcla con té blanco. En este sentido, cabe destacar que ayuda a combatir la retención de líquidos. Además, es beneficiosa a la hora de hacer ejercicio, ya que evita el estrés oxidativo y propicia una mayor oxigenación de los músculos, algo que se traduce después en un mejor rendimiento.
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Té blanco con maca
La maca es un tubérculo proveniente de Perú que también puede aportarte todo tipo de ventajas si decides combinarlo con té blanco. En primer lugar, puede rebajar algunos problemas de infertilidad como, por ejemplo, la disfunción eréctil. También posee efectos antioxidantes gracias a su aporte en flavonoides y antocianinas, reduce la fatiga muscular y **aporta un plus de energía al hacer deporte. **