Durante las horas de sueño, el organismo entra en un potente estado anabólico donde se llevan a cabo importantes procesos de regeneración muscular sintetizando proteínas. El descanso profundo promueve un clima hormonal muy positivo donde se genera hormona del crecimiento, testosterona y melatonina. Es donde suceden las verdaderas adaptaciones buscadas durante el duro entrenamiento actuando no solamente sobre el tejido muscular, sino también sobre el sistema inmunológico y nervioso.
¿Sabías que dormir del lado izquierdo te hace ganar salud?
Déficit de sueño, el mayor efecto catabólico
Podemos pasar varios días sin comer, pero apenas podemos estar dos días sin dormir. Una falta de horas de sueño afectará drásticamente a todo el organismo. En algunas ocasiones no somos conscientes, pero podemos ir acumulando un déficit de sueño que terminará pasando factura a nuestro rendimiento.
Debemos tener presente que a mayor intensidad de trabajo y entrenamiento, mayor deben ser también las medidas de recuperación que se llevan a cabo a través de una alimentación óptima con los nutrientes necesarios (plásticos y energéticos) y un descanso óptimo que para un adulto debe fijarse en un mínimo de 7 horas de buena calidad de sueño.
Si el estímulo (entrenamiento) es elevado, pero sin embargo los procesos de recuperación se ven limitados con déficit en nutrientes o de horas de sueño, el sobreentrenamiento aparecerá, el cortisol tomará protagonismo y esto significa un incremento de los procesos catabólicos sobre los anabólicos con lógicamente pérdida de masa muscular.
Consejos para mejorar la calidad del sueño
- Intenta mantener un patrón constante para ir a dormir a la misma hora.
- Evita realizar actividades físicas intensas al menos dos horas antes de ir a dormir.
- Cena temprano y evita comidas copiosas o de digestión pesada.
- Suprime las bebidas que contengan excitantes/estimulantes al final del día.
- Evita utilizar dispositivos electrónicos que emitan luz justo antes de dormir.
Fase REM
La fase REM (Rapid Eye Movement)** es la más profunda y reparadora del sueño nocturno** donde acontecen ondas cerebrales a plena velocidad con aumento del ritmo cardiaco y una gran relajación muscular. Es donde se suele soñar, si la persona se despierta durante la fase REM es posible que describa ideas o sueños ilógicos y sin sentido.