Llega el verano, llega el calor y llegan la deshidratación, que si en la vida diaria ya nos descoloca y nos hace perder facultades físicas y mentales, durante el ejercicio no sólo disminuye nuestro rendimiento deportivo, además puede llevarnos a deshidrataciones severas que acaban en urgencias.
Todos sabemos ya muy bien la importancia de hidratarnos antes, durante y después del ejercicio, no sólo con agua, también con sales minerales que se pierden al sudar y que hay que reponer, de ahí la importancia de beber agua con sales, y hay muchos productos en el mercado para añadir al agua mientras haces deporte o después, son cómodas.
Yo os voy a dejar mi bebida natural, una Limonada salada de jengibre y limón que bebo cuando hago deporte con calor. Os he dejado las dos versiones que hago, la limonada natural en robot de cocina o batidora y la infusión de limón y jengibre que se deja enfríar.
Ingredientes para 1 litro
- 1 litro de agua filtrada o hervida
- 10 rodajas finas de raíz de jengibre orgánica y pelada
- Zumo de un limón orgánico
- Ralladura de la corteza del limón orgánico
- Media cucharadita de café de bicarbonato de sodio
- Media cucharadita de café de sal del Himalaya o sal marina
- 1 cucharada de miel
Preparación:
1/ Limonada fresca de jengibre y limón fría
Añade todos los ingredientes al vaso de la batidora o al robot de cocina con un vaso de agua y bate todo a la máxima velocidad para que se mezcle bien. Añade el resto de agua bien fría y vuelve a batir. Guarda en la nevera o añade cubitos de hielo para que esté bien fría. Se conserva varios días en la nevera.
2/ Infusión fría de jengibre y limón
- Primero has de hacer la infusión y dejarla enfríar para tomarla fresca en verano
- Pon al fuego o caliente en una hervidora el litro de agua y cuando rompa a hervir, vierte el agua en una botella de cristal en la que ya hayas metido las rodajas finas de raíz de jengibre orgánica y la ralladura de la corteza de un limón orgánico.
- Deja reposar la infusión al menos 10 minutos.
- Cuando esté templada, añade la cucharada de miel, y las medias cucharaditas de café con el bicarbonato de sodio y la sal del Himalaya o marina.
- Mezcla bien agitando y deja enfríar un poco más antes de añadir el zumo del limón orgánico.
- Guarda en la nevera o tómala caliente.
Esta versión de infusión es diferente, vas a notar el sabor un poco más amargo, no mucho, pero sus efectos son más potentes porque gracias al calor se pueden extraer más fitonutrientes de la raíz de jengibre y la corteza de limón que actúan como antiinflamatorios.
Truco: Si la tomas templada, notarás sus efectos refrescantes y energizantes, aunque haga mucho calor. Es un efecto muy curioso e interesante.
Variante de la infusión con té: Prueba a hacerla con té verde o negro que puedes añadir a la botella de cristal con el jengibre y el limón justo cuando hayas vertido el agua hirviendo. así también tienes los antioxidantes y la cafeína del té, un plus de energía para tus entrenamientos.