Para ellas va mi “Teorema del tacón":
La altura del tacón es inversamente proporcional a la tolerancia de la marcha y directamente proporcional a las deformidades del pie.
La altura del tacón también es inversamente proporcional a su frecuencia de uso y directamente proporcional al precio.
Sin embargo, la mayoría de las chicas están dispuestas a pagar precios desorbitados por un calzado que apenas se puede utilizar, que deforma el pie y desestabiliza a la zona lumbar, sin embargo, tienen prejuicios a la hora de comprar unas zapatillas incluso más económicas y hacer sentadillas con carga… el complejo mundo mujer…
¿Sabías que hacer sentadillas tiene una mecánica mucho más natural y segura que correr?
Pues sí, hacer sentadillas y además bajando bien la cadera, resulta no solo menos agresivo para la mecánica humana, sino que además es un gesto beneficioso para la espalda baja.
Estarás pensando que me he vuelto loco, no solo ataco al zapato de tacón alto, sino que además afirmo que la lesiva sentadilla profunda ahora resulta ser la panacea para evitar el dolor de espalda. Pues sí, así lo afirmo y te lo demostraré también con mi “Teorema del tacón".
Ninguna niña de 15 años se calza un tacón de 10 cm y comienza a caminar con estilo. No, comienzan con tacón bajo y a medida que cumplen años (es algo impulsivo y misterioso… el complejo mundo mujer…) la altura del tacón se va elevando. De esta forma, van adaptando su marcha, postura y mecánica para poder caminar sobre algo tan incómodo (lo sé, solo veo mecánica y desequilibrios musculares donde la mayoría de las mujeres ven algo elegante y que estiliza la figura… el complejo mundo mujer...), es un proceso de aprendizaje de años, de sufridas caminatas y de soportar dolores en el antepié.
Mi perspectiva del entrenamiento y la experiencia así lo confirma, el Teorema del tacón también me dice que:
- el uso del tacón resulta inversamente proporcional a la ejecución correcta de la sentadilla
- caminar con tacón provoca acortamiento de la fascia del sóleo y tendón de Aquiles, por esta razón, muchas mujeres al colocarse de cuclillas sus talones no pueden permanecer en contacto con la superficie, si a esta situación le colocamos una barra sobre los hombros, la estabilidad se verá muy comprometida.
- la sobrecarga lumbar acumulada por la disposición de la cadera en anteversión provocará también una sobrecarga muscular añadida a la ya retraída e hipertónica musculatura lumbar. Así que al ejecutar sentadillas, muchas chicas realizan compensaciones colocando los pies en rotación externa y pronación, las rodillas acompañan a la pronación aproximándose y además aparecerá posiblemente molestias e incluso dolor lumbar.
CONCLUSIÓN
La conclusión parece muy fácil ¿no?, las sentadillas pueden ser muy lesivas para las mujeres, mejor utilizar la máquina de glúteos.
Bueno... la solución lógicamente no es conformarse con la máquina de glúteos y evitar atajar la causa.
Una opción mucho mejor es utilizar el Teorema del tacón.
Al igual que necesitaste una adaptación para utilizar los zapatos de tacón alto modificando tu mecánica, también necesitarás una adaptación progresiva para volver a modificar tu mecánica para conseguir realizar una sentadilla.
El primer día no te encontrarás muy cómoda, pero al igual que cuando te calzaste los primeros tacones, debes tener paciencia e insistir, seguramente el primer día que te pones unos tacones te cuesta caminar con naturalidad, pues lo mismo sucederá con la sentadilla, te costará trabajo realizar el gesto con una técnica depurada.
Piensa que cada vez que haces una repetición de una sentadilla, conseguirás estirar tu acortado tendón de Aquiles y tu retraída fascia plantar, cada vez que flexionas tus rodillas tu cartílago recibe su nutrición y los ligamentos consiguen movilizarse, cada vez que bajas la cadera tu zona lumbar se moviliza y esto te interesa, tus glúteos reciben el mejor estímulo para conseguir mejorar tu tono muscular.
“Las mujeres fueron concebidas para amarlas y no para comprenderlas" a pesar de que saben todo esto, continuarán usando taconazos, supongo que para presumir hay que sufrir… el complejo mundo mujer. Así que, como el tacón alto continuará de moda al menos en la siguiente década, al menos compensa sus alteraciones incluyendo sentadillas en tus programas de ejercicios.
Si para presumir hay que sufrir, que sea también sufriendo con algunas sentadillas, te resultará más rentable a medio y largo plazo que invertir en tacones.
