Las posturas de Vaca (Bitilasana) y Gato (Marjaryasana) son dos asanas del yoga que se suelen realizar en secuencia, ya que se complementan entre sí.
Te recomendamos hacer esta secuencia VACA-GATO todos los días al levantarte para conseguir todos sus beneficiios para la salud física y mental
Postura de Vaca (Bitilasana):
- Estiramiento de la columna: Al arquear la espalda hacia abajo, la postura de Vaca ayuda a estirar y flexibilizar la columna vertebral, aliviando la tensión en la parte posterior del cuerpo.
- Fortalecimiento de los músculos abdominales: Al levantar la cabeza y la cola hacia arriba, se activan los músculos abdominales, contribuyendo al fortalecimiento de la zona central del cuerpo.
- Apertura del pecho: Esta postura puede ayudar a abrir el pecho y los pulmones, facilitando la respiración más profunda.
- Estimulación de órganos internos: Se cree que Bitilasana estimula los órganos internos, incluyendo los riñones y el estómago, promoviendo un mejor funcionamiento.
Postura de Gato (Marjaryasana):
- Flexibilidad de la columna: Al arquear la espalda hacia arriba, la postura de Gato flexibiliza y masajea la columna vertebral, ayudando a mantener su movilidad y aliviando la rigidez.
- Alivio del estrés y la tensión: La combinación de la respiración con el movimiento en esta postura puede ayudar a aliviar el estrés y la tensión acumulada en la espalda y los hombros.
- Estimulación del flujo sanguíneo: Marjaryasana se piensa que puede estimular la circulación sanguínea en la espalda y el abdomen, lo que puede beneficiar la salud general del cuerpo.
- Masaje de órganos internos: Esta postura puede tener un efecto de masaje en los órganos internos, incluyendo el sistema digestivo y los riñones, mejorando su funcionamiento.
Ambas posturas, cuando se realizan en secuencia y en combinación con la respiración consciente, pueden ayudar a aliviar la tensión física y mental, mejorar la flexibilidad y fortalecer el centro del cuerpo.