Para millones de personas es una rutina diaria: comprobación de la glucemia con un pequeño pinchazo y un segundo pinchazo con la dosis de insulina correspondiente en función de la intensidad de su diabetes, pero este proceso podría cambiar para siempre con el desarrollo de las nuevas cápsulas desarrolladas por un grupo de investigadores de la Universidad de Nueva York en Abu Dhabi. Los científicos han desarrollado un nuevo método para hacer posible que la insulina 'viaje' y sobreviva su ácido periplo a través del estómago hasta el torrente sanguíneo, sin liberar su carga hasta llegar al destino final.
Cuando tienes diabetes tus niveles de insulina, la hormona que regula los niveles de glucosa en sangre, son inestables y esta situación se controla generalmente con inyecciones subcutáneas de insulina, un procedimiento que no es tan cómodo ni sencillo como la toma de un medicamento por vía oral. El problema es que la insulina es una molécula frágil que se degrada rápidamente en el estómago antes de que pueda hacer su efecto. El desafío era encontrar la forma de preservar la insulina hasta que atravesara la pared intestinal y llegara al torrente sanguíneo, y eso es lo que han conseguido los investigadores de NYU Abu Dhabi.
Los científicos han creado lo que llaman nanopartículas de estructura orgánica covalente ligadas a imina gastrorresistentes (nCOF). Sus cápsulas transportan la insulina entre nanoláminas que la protegen del ambiente hostil del estómago y que se abren camino hacia el torrente sanguíneo a través de la barrera intestinal. Cuando los nCOF llegan a la sangre pueden monitorizar automáticamente los niveles de insulina del paciente y liberar el medicamento sólo cuando sea necesario. Esta 'magia' ocurre porque la glucosa es una molécula pequeña que puede atravesar los poros del nCOF, por lo que a medida que aumentan los niveles, se ve forzada dentro de las nanopartículas y allí desaloja físicamente la insulina contenida en su interior. Este mecanismo también ocurre de la forma opuesta, por lo que la liberación de insulina se ralentiza a medida que los niveles de glucosa en sangre vuelven a bajar.
Según declara Farah Benyettou, autora principal del estudio. "La tecnología responde rápidamente a una subida del azúcar en sangre, y se ralentiza para evitar una sobredosis de insulina, con lo que mejorará drásticamente el bienestar de los pacientes diabéticos".
De momento las pruebas hechas en ratas con diabetes muestran que los nCOF estabilizan sus niveles de glucosa en sangre, que vuelven a sus niveles normales tras las dos horas posteriores a la ingesta de las cápsulas. Hay otros dos métodos de administración de insulina oral en desarrollo, Oramed y HDV-I, que ya han sido aprobados por la FDA, pero el nuevo sistema nCOF tiene ventajas: la insulina no solo sobrevive con éxito el viaje a través del tracto gastrointestinal, sino que es la primera que actúa al producirse hiperglucemia. Además, las propias nanopartículas tienen una alta capacidad de insulina, de alrededor del 65 por ciento en peso. Aún queda trabajo para investigar si los beneficios son igual de efectivos en humanos, pero este primer desarrollo en ratas parece indicar que así será.
Fuente: Revista Chemical Science.