Sin duda alguna la cadera es la zona donde van a repercutir los
acortamientos musculares del corredor. Unos isquiotibiales o flexores
de cadera acortados, crearán un desequilibrio y patrones motrices
incorrectos, no solo limitando la mecánica y eficiencia de la carrera,
sino que pueden dar lugar a sobrecargas y lesiones. Puede ser el origen
de lesiones de espalda y de pubis, además que limita tu rendimiento ya
que provocará que tu zancada sea excesivamente corta.
En el caso de que estén acortados, que ya decimos es muy
habitual entre los corredores populares, debes hacer estiramientos de
estos grupos musculares cada día.
Isquiotibiales
Objetivo: Evaluar la flexibilidad de la musculatura isquiotibial.
Descripción: Tumbado supino, con los brazos en cruz, eleva una pierna extendida hasta llegar al límite.
Valoración: Medir el ángulo formado con la pierna y la superficie.
Valoración |
Ángulo recorrido |
Buena | Mayor de 90°, sobrepasa la vertical |
Regular | 90°, en la vertical |
Insuficiente | Menos de 90°, no llega a la vertical |
Flexores de cadera
Con este ejercicio podemos comprobar si los músculos flexores
de cadera, psoas y recto anterior del cuadriceps, se encuentran
acortados. Estos músculos suelen presentar un carácter bastante tónico
y se presentan acortados restando movilidad en la cadera y colocándola
en anteversión (culo hacia fuera), provocando frecuentes molestias en
la zona lumbar por una lordosis excesiva.

Descripción del test:
Colócate tumbado en una superficie elevada con tus piernas en el aire. Aproxima una pierna flexionada, acercando la rodilla hacia el hombro. En esta posición observa a que altura se encuentra la rodilla de la pierna que se encuentra en el aire. Si la rodilla se encuentra por debajo de la articulación de la cadera significa que tu movilidad es muy buena y que tus flexores de cadera no están acortados, si por el contrario, la rodilla está más elevada que la cadera nos indica que tus flexores se encuentran acortados restando movilidad a la articulación del fémur con la cadera.
Valoración |
Posición de la pierna extendida |
Buena | La rodilla permanece por debajo de la articulación de la cadera |
Regular | La rodilla está a la altura de la cadera |
Insuficiente | La rodilla se sitúa por encima de la articulación de la cadera |