La edad real de una persona podría medirse por la flexibilidad de su columna vertebral. Una columna flexible es garantía para tener más calidad de vida agilidad en la vejez y la práctica de yoga ayuda a prevenir y mejorar muchos de los problemas de columna que padecemos ahora por las largas jornadas frente al ordenador o simplemente por una mala postura al movernos o hacer ejercicio.
Te recomendamos hacer estas cuatro posturas durante 5-10 minutos cada día. Bien a primera o última hora del día, o después de tu práctica deportiva, o como estiramiento rutinario para la espalda. Practicadas con asiduidad, pueden ayudar a liberar la tensión acumulada, prevenir lesiones y cuidar tu espalda deportista.
Más yoga para cuidar tu espalda
Importante: son posturas sencillas y seguras, por lo que si sientes dolor agudo en alguna de ellas, evítala y acude a tu médico especialista para revisar la espalda.
Postura del niño / Balasana
- Beneficios: es idónea para relajar la espalda. Se puede practicar en cualquier momento que se sienta tensión.
- ¿Cómo se hace? Arrodíllate en el suelo y siéntate sobre los talones. Lleva el abdomen hacia los muslos y la frente hacia el suelo. Puedes llevar los brazos estirados hacia delante y apoyar las manos en el suelo para que la postura sea un poco más activa, o llevar los brazos al lado del cuerpo.
Respira profunda y conscientemente entre 5 y 10 veces llevando el aire hacia la espalda. Ya verás como cuando acabes, sentirás la espalda más relajada.
- Atención: esta postura no es recomendable para personas con problemas de rodillas.
Perro Boca Abajo / Adho Muka Svanasana
Permite alargar todos los músculos de la espalda y parte posterior de las piernas.
Beneficios: es muy recomendable practicarla cada día pues ayuda a descontracturar y alargar los músculos.
- ¿Cómo se hace? Colócate en el suelo con las rodillas debajo de las caderas, los brazos estirados debajo de los hombros, y las manos bien abiertas. Gira los dedos de los pies hacia el suelo y sube lentamente los isquiones hacia el techo.
Si eres principiante, mantén las rodillas dobladas, asegurándote de que empujas desde las manos alargando tu espalda, relajando la cabeza y alejando los hombros de las orejas.
Si ya practicas esta postura, empuja también desde las manos hacia los talones, tratando de estirar las piernas y de llevar los talones hacia el suelo. Asegúrate de que los pies están paralelos.
Haz entre 5 y 10 respiraciones profundas y conscientes sintiendo cómo tu espalda se va acomodando en la postura.
Postura de la Pinza / Paschimotanasana
También facilita un estiramiento intenso en la parte posterior del cuerpo, tanto en la espalda como en las piernas.
- Beneficios: es muy recomendable para personas deportistas, para ir mejorando la flexibilidad de la espalda y los isquiotibiales poco a poco.
- ¿Cómo se hace? Siéntate con los isquiones bien enraizados en el suelo. Si no practicas yoga o te cuesta mantener la espalda recta cuando te sientas en el suelo, coloca una manta debajo de tus glúteos y utiliza una cinta para coger tus pies.
Si puedes, sigue acercando el pecho hacia las piernas. Relaja tus hombros y mantén entre 5 y 10 respiraciones conscientes y profundas.
Piernas hacia el pecho / Apanasana
Esta postura es muy recomendable para relajar la zona baja de la espalda. Apoya toda la espalda en el suelo. Inhalando, lleva las rodillas hacia el pecho y abrázalas. Puedes respirar mientras mueves ligeramente las piernas de lado a lado o hacer círculos, masajeando la zona baja de la espalda.