Ir al fallo, lo mejor para... fallar

¿Hay que llegar hasta el fallo muscular, o no?

Domingo Sánchez

Ir al fallo, lo mejor para... fallar
Ir al fallo, lo mejor para... fallar

Ir o no ir al fallo, esta es la cuestión que más controversia suscita, sobre todo en planteamientos de desarrollo muscular. Analicemos cuando es el momento para aplicar esta estrategia clásica de entrenamiento y sobre todo cuando no es interesante aplicarla.

  • Se podría justificar su aplicación en series largas (12-15 repeticiones) con intensidad moderada con el objetivo de conseguir así el máximo reclutamiento de fibras. También estimula una respuesta hormonal más intensa.
  • Para series más cortas donde se realicen 6 o menos repeticiones máximas con cargas mayores al 85%, la situación es diferente ya que el reclutamiento es máximo sin necesidad de llegar al fallo (en personas entrenadas).

Teniendo esto en cuenta y, como norma general, si tu principal objetivo es el desarrollo muscular debes realizar intensidades moderadas (70-75%) pero llegando al fallo muscular.

Ahora bien, si tu objetivo es de fuerza máxima las series deben detenerse a la mitad de las máximas repeticiones posibles, la referencia es detenerse antes de que sientas que la velocidad de ejecución comienza a disminuir sea cual sea la carga.

Para objetivos intermedios de mejora de fuerza e hipertrofia, que es lo más habitual, elegir intensidades elevadas (85% o ) sin llegar al fallo puede ser la mejor opción.

Por tanto,ir al fallo no puede ser una estrategia utilizada de forma sistemática en todas las series y entrenamientos, debe programarse para ser aplicado con fundamento y aprovechando los beneficios de este estímulo.