A pesar de su aspecto elegante y sofisticado este altavoz está hecho para 'darle caña', se puede sumergir 30 minutos a 1,5 metros (IP67), aguanta polvo, radiación ultravioleta, corrosión y tiene la enorme ventaja de flotar, así que sí te lo llevas contigo en tus aventuras acuáticas y se te cae al agua lo recuperas fácilmente y continúas con tu particular fiesta. Eso te da la tranquilidad de poderlo enganchar, por ejemplo, a los cordajes de tu tabla de SUP y remar sin la tensión de pensar qué pasaría si el altavoz se suelta.
Lo hemos estado usando tanto en casa como en el campo y no ha dejado de sorprendernos por su potencia con las bajas frecuencias, además de por sus agudos nítidos y por la buena definición de cada sonido. Matices, como por ejemplo los soplidos en los instrumentos de viento o los roces de los dedos sobre las cuerdas, se perciben muy reales. Llevando el altavoz en la mochila notas cómo te vibra la espalda con los bajos.
Su aplicación, Bose Connect, nos permite actualizar el software del altavoz y administrar su configuración. Nos muestra el porcentaje de batería, el tema que estamos reproduciendo y nos sirve de control remoto para el volumen, pausa, salto de canción, etc. con lo que podemos llevar el altavoz guardado y controlar la música sin tocarlo. No hay posibilidad de ecualización del sonido desde su app, algo que nos ha extrañado, aunque ellos argumentan que ese ajuste ideal ya se realiza de forma automática por sus tecnologías de procesamiento de señal digital (DSP), el propio código y los algoritmos personalizados. Lo cierto es que se escucha increíblemente bien, pero tampoco nos hubiera molestado poder darle nuestro propio toque con más o menos agudos, más o menos medios, etc.
La app también te da acceso al modo fiesta, para conectar más de un altavoz Bose y permite programar el temporizador de apagado automático, interesante si quieres ponerte música relajante para dormir, por ejemplo.
Colócalo como quieras
El Bose Soundlink tiene una curiosa función, PositionIQ™ con la que se ajusta el sonido en función de la posición en la que lo coloques para que siempre se escuche perfecto, la verdad, nos ha faltado sensibilidad para apreciar la diferencia por más que lo hemos cambiado de vertical a horizontal o tumbado, o a lo mejor es que eso es precisamente lo que hace, que por mucho que lo movamos se siga escuchando bien.
El micrófono integrado del Bose Soundflex Link es perfecto tanto para usar Google Assistant o Siri y pedirle cambios de canciones, de volumen o lo que quieras y además nos sirve como manos libres, para hablar por teléfono en cualquier momento con una calidad de sonido más que aceptable. Otro detalle es que recuerda hasta 8 dispositivos, aunque sólo se puede conectar a dos simultáneamente, y nos permite conmutar de uno a otro con un toque de botón, ideal cuando lo emplean varios usuarios o si tú mismo emites música desde el móvil, el ordenador u otros dispositivos diferentes. Por ejemplo puedes estar escuchando música desde tu móvil y que además esté conectado con tu ordenador, recibes una llamada, la atiendes desde el altavoz y se para la música, acabas tu llamada, cuelgas, luego pones un vídeo de YouTube desde el ordenador y lo escuchas también desde el altavoz, sin tener que hacer nada.
OK:
- Flota y resiste la arena, ideal para deportes playeros.
- Alto aguante a impactos (aunque no es irrompible…)
- Enorme calidad de sonido.
- 12 horas de autonomía, de las mayores del mercado.
- Muy compacto.
KO:
- Sin posibilidad de ecualización.
- Modo fiesta solo compatible con otro altavoz Bose, no con otras marcas.
Peso: 584 g
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