Es un problema relativamente frecuente en pruebas largas como el maratón, entre los nervios de la carrera y el meneo que le das a tus intestinos con cada zancada activas la necesidad de evacuar, por eso los inodoros a menudo están llenos de corredores a mitad de carrera. Si alguna vez te ha pasado y quieres evitarlo, toma nota:
1. Visita “al Sr. Roca" por la mañana.
Habitúate a ir por la mañana al baño, de esta forma el día de tu carrera podrás salir con la menor cantidad de materia intestinal posible, minimizando el riesgo de que te den ganas de pasarte por el inodoro en carrera. Correr hace que la sangre se desplace del tracto digestivo a tus músculos y si tienes sustancias sin digerir podría resultar en una diarrea.
2. Avituallamientos, con calma.
Engullir de dos mordiscos una barrita en un avituallamiento o querer beberte un vaso entero de isotónico de un trago no hará más que añadir aire a tu estómago y dificultar los procesos digestivos. El resultado podría ser una parada obligatoria en “boxes".
3. Avanza hacia delante, no arriba y abajo.
Cada kilómetro que recorres das cerca de 600 saltos que agitan tu estómago y complican tu digestión, si eres capaz de disminuir la oscilación vertical de tus zancadas estarás minimizando este riesgo. Hay GPS que incluyen la función de registro de la oscilación vertical, que te ayudarán a correr más plano. Mientras corres imagínate que tienes un techo sobre ti que está a apenas unos centímetros sobre tu cabeza, esta imagen te ayudará a no saltar tanto entre zancada y zancada. El entrenamiento excéntrico de piernas también te ayuda a correr con menos saltos.
4. Baja el consumo de fibra y grasas.
Las grasas enlentecen la digestión y la fibra activa el tránsito, la combinación de ambos no es la ideal si quieres evitar una visita al baño, así que un par de días antes de tu carrera baja tanto el consumo de alimentos grasos como el de los que tienen fibra. La fibra es ideal para mantener tu salud intestinal, pero tómala en los periodos que estés entrenando, no antes de las competiciones. Evita las natas, fritos, lácteos enteros… y disminuye el consumo de carbohidratos complejos, coliflor y brócoli el día previo a tu carrera.
5. Cafeína, la justa.
Mejora el rendimiento y te da más chispa, sí…pero también hace que tus intestinos se vuelvan más activos. El día de la carrera evita tomar más sustancias con cafeína de las que sueles tomar habitualmente en tus entrenamientos, ten cuidado con los geles que reparten en el avituallamiento porque pueden contenerla.