¿Cómo llega un chico canario como tú a un podio olímpico como gimnasta?
Yo empecé en Lanzarote con 11 años. Yo hacía atletismo, baloncesto (que aunque soy bajito saltaba mucho), algo de balonmano… Eran mis hermanas las que hacían gimnasia y un día fui a ver una exhibición y me quedé flipado viendo a los chicos que había allí haciendo mortales. Y me dije, “que guay, yo también quiero”. Además, con la gimnasia llegaba a casa reventado…¡algo que a mi madre le encantaba!
¿En qué momento te diste cuenta que podías llegar muy lejos en el Mundo de la gimnasia?
La verdad es que no sé decirte un momento exacto pero sí que es verdad que a medida que va pasando el tiempo quería competir a un nivel un poco más alto. Fue clave cuando me fui a Barcelona para entrenar con un mito como Gervasio Deferr y con Victor Cano. Allí, con 14 años, ya teníamos el reto de poder estar en unos Juegos Olímpicos. Me fui a Madrid, al Centro de Alto Rendimiento, y rápidamente empezó todo a ir fluido. En 2015 gané mi primer medalla en un Mundial a ir fluido. En los Juegos Olímpicos de Río fui undécimo y mi reflexión fue que no estaba tan lejos de entrar en una final olímpica y poder pelear por esa medalla que finalmente logré en Tokio. Ahora en Paris voy a luchar por estar en lo más alto. Hay que seguir avanzando.
¿Qué se siente cuando uno está en un podio olímpico?
Mira, yo antes de irme de mi casa para los Juegos Olímpicos de Tokio, salí al balcón mi hija Olimpia que tebía dos meses y le dije: “Papá mañana se va a los Juegos Olímpicos y de allí, no sabes de qué color va a ser, pero va a traer una medalla para ti”. ¡Por suerte, no falte a mi palabra! En el podio me acordé mucho de Gervasio Deferr y Víctor Cano, porque cuando yo empecé a entrenar con ellos en Barcelona, ellos me dijeron, “tú tienes que estar tranquilo porque vas a ganar una medalla olímpica”. No sé por qué me vino ese recuerdo, pero ellos sabían algo, veían algo en mí que otros entrenadores no veían en su momento cuando yo quería formar parte de algún centro de alto rendimiento y me decían que era muy mayor- Ellos dos apostaron muy, muy fuerte por mi. ¡Me alegro mucho que hayan tenido razón! También, por supuesto, me acordó de mi club de gimnasia de Lanzarote.

De cara a Paris, has tenido el frenazo con tu lesión.
El deporte de alto rendimiento es lo que tiene. Las lesiones llegan cuando menos te lo esperas. Voy saliendo muy progresivamente para poder llegar en el punto exacto a los Juegos Olímpicos de París. La lesión fue haciendo un último salto de corrección de buscando esa decimilla que puede ser la que te da la medalla. Fue justo antes de viajar la primera Copa del Mundo del año y estaba muy, muy bien de forma. Tuve una lesión del gemelo en interno; parecían que iba a ser 2 semanas y al final ha terminado siendo algo más de 2 meses. Me ha dejado fuera del Europeo y sin otras competiciones pero ya estamos dándole caña y el 20 de mayo tenemos como objetivo competir en la primera Copa del Mundo en Barcelona. Se hace duro estar lesionado. Es fácil levantarte de la cama cuando todo marcha, aunque estés cansado, pero es más difícil levantarse cuando estás lesionado. Yo he dado el máximo en el gimnasio, en la fisioterapia, para acortar los plazos.
¿Cómo es un día en tu vida cuando estás preparando unos Juegos Olímpicos?
Bueno, pues como ya sabéis, también tengo dos hijos y a las 7:10 de la mañana yo ya estoy en pie, para levantarlos, darles el desayuno, vestirles para llevarle a la guardería. ¡Y también bajo el perro! Por la mañana me tomo mi café en casa. Hasta ese momento es como si fuera una vía de un padre “normal”.
Luego me voy a mi trabajo, a mi “oficina”, que es el gimnasio. Llego sobre las 9:30 de la mañana. Hago el tratamiento de fisioterapia que normalmente solemos hacer que es para calentar los tendones y después a las 10 pasamos allá a la sala de entrenamiento, en la cual empezamos haciendo unos estiramientos, un calentamiento, preparación física y luego empezamos a hacer el trabajo técnico en aparato. Sobre las 12.30 me vuelvo para casa, me hago la comida, me tumbo unos 20 minutos y vuelta al gimnasio. Desayunar poco más que el café para no sentirme pesado, sólo si esto en semana de competición me suelo comer algunos dátiles y algunas almendras para tener un poquito más de energía, eso ya lo vamos ajustando con el nutricionista. A mediodía, una comida también ligera, pues tampoco me gusta sentirme muy hinchado. Hoy, por ejemplo, me he comido dos filetes finos de pollo que con algo con dos huevos cocidos y un poco de pasta.
A la hora de saltar quieres estar más ligero de peso y así me cuesta mucho menos el entrenamiento de la tarde empieza a las 4:00 de la tarde y bueno, ahí solemos hacer ejercicio completo de competición más el ejercicio. A veces lo dividimos en dos partes, hacemos a lo mejor 6 series, pues a lo mejor hacemos el ejercicio completo y luego hacemos los 4 primeros elementos de este ejercicio y luego los 4 últimos elementos. Me suelo subir bastante a las anillas, también hago salto y al final de su entrenamiento vamos a la sala de musculación a hacer un trabajo complementario de pesas de fuerza y finalizamos siempre con un trabajo de cardio. Al final estoy muy, muy cargado y para el fisio a que nos descarguen las piernas y lumbares, que son puntos críticos para un saltador.
Suelo llegar a casa sobre las 7 de la tarde, baño a los pequeños, les damos de cenar, luego me ducho yo, bajo al perro, ceno y después ya acostamos a los niños. Para terminar el día veo algo de tele con mi pareja que no hemos podido compartir mucho tiempo durante el día. Y al día siguiente, ¡vuelta a empezar!
¿Qué te parece a ti el proyecto que ha lanzado azulmarino para favorecer el bienestar y el descanso de los atletas olímpicos y paralímpicos españoles?
El proyecto “El descanso de nuestros guerreros” de azulmarino para mí es alucinante, es una oportunidad muy buena para que el deportista pueda descansar. Además, en en un lugar como es República Dominicana que es inmejorable, con sus playas, su gente, una cultura diferente. Yo ya estuve allí en mayo y es perfecto para una buena terapia, para el descanso físico como el mental que tenemos los deportistas con tanto tiempo en las salas de entrenamiento más el estrés de las competiciones. Siempre estamos dándole vueltas, vueltas, vueltas a todo…. Una gran idea este sorteo 10 viajes para dos personas a República Dominicana para recuperarte de los Juegos Olímpicos y y Paralímpicos- Además, si has conseguido un buen resultado en el en los Juegos Olímpicos, pues tendrán más posibilidades de ganar. La verdad que creo que hay que agradecer azulmarino que piense en nosotros los deportistas para recuperarnos de los Juegos, porque es el punto final no sólo de 4 años de trabajo dejando toda tu vida en esto para jugártelo en unos minutos, es que vienes trabajando desde mucho antes, desde que eres casi un niño, para lograr el sueño olímpico.
Vamos con la última. Nosotros estamos temblando cuando estás preparado para iniciar la carrera en uno de tus saltos en unos Juegos Olímpicos. ¿Tú también estás nervioso?
¡Yo creo que es estoy el triple nervioso que todos vosotros que estáis viéndolo por la tele! Sabes que el mínimo error te puede dejar fuera de ese de ese pódium. Es un deporte, tienes que estar preparado al 100% pero también necesitas unas gotas de suerte en el momento de la verdad. Sientes que estás representando a tu país con lo que eso supone.