Escalada, todo lo que necesitas saber para iniciarte en el rocódromo

Lo que necesitas conocer para empezar a escalar, ¡vamos a conquistar las alturas del rocódromo!

Paula González Carracedo/ Jordi López

Escalada, todo lo que necesitas saber para iniciarte en el rocódromo
Escalada, todo lo que necesitas saber para iniciarte en el rocódromo

¿Te gustaría probar un deporte que además de ponerte muy en forma te ayuda a conocer tus puntos fuertes y débiles? ¿Algo que te obligue a superarte en cada sesión? ¡Lo tuyo es la escalada! Busca un centro de escalada indoor que te ayudará a prepararte para cuando llegue el buen tiempo.

¿QUÉ ME APORTA LA ESCALADA?

La escalada es, sobre todo, tiempo para ti. Para conocer mejor tu cuerpo, sus posibilidades y la capacidad que tiene para resolver cada vía. En inglés, a las vías o bloques se les conoce como “problems” porque tenemos que pensar para resolverlos. Si lo tuyo son los deportes de repetición donde apenas hay que discurrir dónde y cómo debemos hacer el siguiente movimiento, la escalada te supondrá todo un reto. Pero si eres de esas personas inquietas, que necesitan averiguar de qué son capaces y de qué están hechos sus miedos, la escalada te dará justo lo que necesitas.

Además… ¡muy pronto será deporte olímpico! Se estrenará en Tokio 2020 en 3 modalidades: dificultad, bloque (búlder) y velocidad. Hemos hablado con la Campeona de España de Escalada de dificultad, Helena Alemán Sobrino, para que nos explique qué necesitamos saber si queremos comenzar en este deporte. “Es muy típico probar, engancharte y estar cada día en el roco machacándose. ¡Hay que descansar! Escuchar el cuerpo…” dice esta santboiana de 32 años y profesora de escalada en el rocódromo Ingravita de Igualada. “También hay que tener buenos hábitos: alimentación, sueño… que antes de obsesionarse por conseguir más fuerza, hacer grado, etc. hay que procurar aprender a escalar bien – ¡con una buena técnica!-. Intenta buscar un entrenador o un instructor con titulación que enseñe o entrene, pero sobre todo ¡disfruta!”

Para Helena la escalada es “una válvula de escape, un desahogo placentero, e incluso una manera de refugiarte y evadirte de los problemas. Cuando conectas contigo mismo, respiras, el tiempo se para, nada de afuera importa, eres tú sosteniéndote, forzando tus límites y dando lo mejor de ti.”
Así que no vamos a mentir: escalar es muy duro y en muchas ocasiones da miedo. Pero nuestro sistema de recompensa del cerebro se ve rápidamente gratificado cada vez que das un pasito más y agarras otra presa; o cuando consigues hacer tu primera vía o bloque completos a vista sin que nadie más te ayude. Incluso cuando tienes tu primera caída y compruebas que nada ha pasado.

¿Por dónde empiezo? 

Estas son las recomendaciones de Helena Alemán para iniciarnos en la escalada indoor (la modalidad de escalada que se practica en rocódromo y no en roca) y en “búlder” (una forma de escalada en la que quien la practica no sube a suficiente altura como para sufrir caídas graves), así como fáciles ejercicios que puedes ir a probar por tu cuenta. Aunque siempre la recomendación estrella, como nos decía Helena, será que te apuntes a clases en tu rocódromo más cercano.

PRIMERAS RECOMENDACIONES PARA ESCALAR

Una vez hayamos calentado bien, sin olvidar cuello, pies y manos, Helena Alemán nos dice que lo primero que tenemos que comprender es que tenemos que “solventar una secuencia con el menor coste energético y eso se hace equilibrándote, buscando siempre estabilidad.” Por lo que buscaremos tres puntos de apoyo (pies y manos) para poder ir moviéndonos por la pared.

La escalada, al ser un deporte acíclico, donde no se repiten todo el rato los mismos gestos como, por ejemplo, pedaleando en una bicicleta, es importante observar el tipo de gestualidad del que disponemos para ser no solo más eficaces (resolver un movimiento) sino más eficientes (resolver ese mismo movimiento con el menor coste energético posible).

LAS MANOS

Además de un color que identifica el tipo de vía y su dificultad, cada presa (agarres) tiene un sentido que nos indicará por dónde debemos cogerla para ser lo más eficaces posible en nuestro agarre y adherirnos mejor a ella.

Lo bueno de los rocódromos es que los fabricantes de presas y quienes equipan las vías y bloques, ya tienen en cuenta esto por lo que solo debemos fijarnos en cómo están puestas las presas para ver qué sentido tienen y desde ahí podremos deducir luego bien cómo colocar los pies y el resto del cuerpo para que nuestro centro de gravedad esté siempre equilibrándonos.

LOS PIES

Nuestras bases de apoyo por excelencia son los pies, por algo somos bípedos. “El fundamento de la escalada es encontrar una posición estable de nuestras bases de apoyo, que son nuestras piernas principalmente” dice Helena. También tenemos mucho más desarrollada la musculatura del tren inferior, por lo que en escalada esto tampoco debe cambiar: hay que escalar con las piernas.

Es común, sobre todo al principio, agarrarse con mucha fuerza utilizando las manos, por lo que cargaremos mucho nuestros antebrazos y, si hay sobreesfuerzo, quedamos expuestos a lesiones. Aprender a pisar correctamente es uno de los mayores retos de la escalada pero quizá sea el que más nos puede ayudar a escalar mejor si conseguimos dominarlo lo antes posible.

Cómo pisar correctamente en la escalada:

Con la punta del pie de gato, idealmente haciendo presión con nuestros dedos gordos y la cara interna del pie.
Pisar sobre las puntas nos permitirá pivotar sobre ese pie. Si pisamos de forma incorrecta, especialmente en superficies muy pequeñas, nuestro pie se escurrirá fácilmente haciéndonos perder el equilibrio.

 Si te ha picado la curiosidad esto de entrenar en vertical, no te puedes perder esta guía de material con lo básico para iniciarte en la escalada.