Son muchos los que encima de la mountain bike se dedican sólo a pedalear, sin buscar complicaciones y luego se lamentan de lo mal que van en las trialeras. Como no se les da bien la técnica no la practican nunca y el círculo vicioso no acaba nunca. Si tienes este problema estos ejercicios son para ti. Los hay sencillos y los hay avanzados, pruébalos dentro de tus posibilidades y trata de ser regular con ellos. Una de las claves es repetirlos con frecuencia. Aunque al principio te veas torpe sigue probando, mejor aún si los haces en compañía, para tener una referencia y para que te resulte más divertido. No hay más que dedicarle un rato de vez en cuando. Mejor aún, tómatelo como un calentamiento y haz cinco minutos de estos ejercicios siempre antes de empezar a pedalear más enérgicamente. Al cabo del tiempo te notarás más suelto y con más control, y verás cómo los senderos complicados no lo parecerán tanto.
1. Nivel fácil
¿Quieres lograr esto?
1. CONTROLAR TU TRAYECTORIA PARA NO METERTE EN UN REGUERO PARALELO A TU RECORRIDO
Hay algunos obstáculos que parece que tuvieran magnetismo, como ocurre con las zanjas o los regueros que se forman en los caminos, y que recorren un tramo de los mismos a lo largo. Te vas yendo inevitablemente hacia el reguero acabas con los huesos en el suelo porque la rueda
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Haz ésto: EN LÍNEA. No necesitas más que una línea marcada en el suelo o, mejor aún, un bordillo. El ejercicio que te dará la destreza necesaria para salir airoso de tu enfrentamiento con los regueros no es otro que recorrer la línea o bordillo longitudinalmente. La técnica a emplear es la de desplazar el peso del cuerpo hacia el lado que te estás desequilibrando, de esta forma puedes mantener la bici sobre la trazada correcta. El error habitual es inclinarse al contrario, alejándose del reguero, y esto suele llevar a tus ruedas a entrar de pleno en el obstáculo. Puedes probar variantes como pasar con un solo pie y luego con el otro, ir pedaleando, ir con impulso sin pedalear, etc. |
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¿Quieres lograr esto? 2. CURVA BIEN EJECUTADA Y TRAZADA CORRECTAMENTE Para moverse con seguridad por la montaña hay que encontrarse cómodo en las curvas, aprendiendo a trazarlas y desplazando el centro de gravedad hacia delante y abajo para aumentar la estabilidad, en el momento justo. Es importante que al acabar vuelvas a recuperar la posición erguida para centrar el peso y la estabilidad. |
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Haz ésto: DE ESE EN ESE Y GIRO PORQUE ME “PARESE”. Un ejercicio clásico pero no por ello poco efectivo. Pon en el suelo piedras, bolsas, conos o lo que tengas a mano y pásalos alternativamente a derecha e izquierda. Concéntrate en pasar de forma limpia, con continuidad y sin “atrancarte”, para ello tendrás que inclinar, echar el peso en el pie externo de la curva cada vez y elevar el peso cuando te endereces, entre curva y curva. Repitiendo este ejercicio con regularidad lograrás la soltura necesaria para hacer el gesto del cambio de peso en la curva de forma automática. |
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2. Nivel medio
3. PASAR UN OBSTÁCULO PERPENDICULAR A TU DESPLAZAMIENTO
Puede ser un tronco o una roca de dimensiones notables o quizá una rama más gruesa de lo normal, pero no será raro que te encuentres de vez en cuando con obstáculos en el camino. Mejor que bajarte de la bicicleta, lo ideal es aprender a sobrepasarlos por si llegas a ellos con una velocidad superior a la necesaria para pararte antes.
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Haz ésto: EL BALANCÍN. Pinta dos o tres rayas en el suelo, separadas un par de metros. Puedes hacerlo fácilmente con agua del bidón de la bici, o aprovechar las marcas de un parking. Tienes que pasar sobre las rayas sin tocarlas con ninguna de las dos ruedas. Esta técnica es la misma que tendrás que usar para sobrepasar el tronco. Tira del manillar hacia los hombros a la vez que das una pedalada fuerte desplazando tu peso atrás. La combinación de estos gestos es suficiente para despegar la rueda delantera de forma que no toque la raya. En cuanto la delantera aterrice dale un toque suave y preciso al freno delantero a la vez que quitas el peso de los pedales lanzándote adelante como si saltaras apoyando el peso en el manillar: estarás levantando la trasera. Comienza con una sola marca y cuando tengas práctica hazlo con varias seguidas. |
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3. Nivel alto ¿Quieres lograr esto? 4. Cambiar de trayectoria de un salto |
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Haz esto: SALTO DE ESCALÓN LATERAL. Puedes comenzar a familiarizarte con el gesto del salto lateral usando un escalón. Si llevas pedales automáticos te resultará sencillo, porque sólo tendrás que inclinarte con suavidad al lado al que vas a saltar y dar un tirón arriba a la vez del manillar y de los pedales. Para empezar ponte muy cerca del borde, de forma que no te puedas enganchar y caer. Si no te encuentras seguro no tienes más que poner a un ayudante abajo que te sujete en caso de apuro. De repente ves que te estás dirigiendo al lado malo del camino (zona con grava o arena, barro, baches, etc.) y justo a la derecha o izquierda el firme está mejor. La solución es dar un salto lateral para cambiar de trayectoria. Es un movimiento avanzado, en el que tienes que inclinar ligeramente la bici al lado que quieres ir, de inmediato tiras fuerte del manillar arriba, saltando en los pedales y girando el manillar. Con la inclinación, al despegar te desplazarás de lado. |
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