Soy una persona nocturna, o como dicen los americanos un 'búho'. Esto significa que me levanto dormida, no hablo ni me relaciono mucho por la mañana, tiene que pasar un rato para que me active. No tengo ni ganas de desayunar.
Siento mucha envidia las personas como Fran, mi 'chico', que se levantan súper activos, y son 'alondras' o 'early birds' como las llaman en inglés. Yo no puedo, imposible.
Mis mejores momentos son siempre por la tarde y la noche. Soy mejor deportista, más creativa, más divertida y hasta más positiva. Es mi naturaleza, nací así, lo malo es que a veces necesito ser alondra.
Estos días de verano, lo del horario de 8 a 3 es una tortura para mi. Me pongo el despertador calculando cuántas horas voy a dormir, y claro, a la 1:30 de la noche es cuando me voy a dormir, y me agobia pensar que así no voy a descansar más de 5-6 horas, si quiero levantarme pronto para llegar a tiempo a las 8 al trabajo.
Los fines de semana podría dormir más, pero me da pena no aprovechar la mañana para entrenar, más a hora con el entrenamiento del Medio Ironman para Budapest. Las mejores horas para nadar en la piscina sin gente y rodar en bici por carretera sin tráfico y sin calor son temprano, no hay manera de salir a pleno sol y hacer kilómetros con este sol de agosto. Así que me pongo el despertador y me meto en la piscina y voy contando largos lentamente, imposible hacer una serie hasta que pasa un rato en el agua.
Una noche encontré un artículo interesante en el Huffington Post que me ha servido de inspiración para escribir esta entrada de hoy: 'Early Birds versus Night Owls: What your bedtime really says about you'
En el artículo se habla de las ventajas e inconvenientes de ser búho o alondra, os resumo los 5 puntos:
Inteligencia
Aunque el refrán dice que: 'A quien madruga, Dios le ayuda' o en inglés 'Early bird gets the worm' algo así como: 'El pájaro madrugador es que consigue el gusano', los estudios dicen que los búhos son los que mejores resultados tienen en los test de inteligencia. Vamos, que han visto que las personas superdotadas o muy inteligentes suelen ser búhos generalmente. Aunque las alondras mañaneras suelen tener resultado más constantes en la escuela porque el horario de 9 a 5 les va muy bien con su patrón de actividad y son más sociables con sus compañeros, pero dejan de ser tan productivos según pasa el día.
Encanto
Los buhos cazan de noche, y parece que los hombres-buho también, según un estudio los varones que tienen patrones de búho tienen el doble de parejas sexuales que los que son alondras tempraneras. La mala noticia es que los búhos suelen ser poco dados a tener parejas de larga duración en comparación con las alondras. Incluso un estudio australiano dice que los buhos tienen la 'triada oscura' un trastorno de personalidad que se asocia a narcisismo, maquiavelismo y psicopatía, y es que la noche confunde a muchos.
Creatividad
Aquí ganan los búhos que suelen ser los más creativos en general. Pintores, músicos, artistas, escritores, etc. son amigos de la noche desde hace siglos. En cambio las alondras lo que pierden en creatividad lo ganan en productividad. Un estudio de la Universidad de Barcelona dice que los búhos suelen ser más probables a probar experiencias nuevas y desconocidas, toman más riesgos, y es que sus niveles de cortisol, u hormona del estrés, es más alta que los de las alondras. Los búhos toman más riesgos, y esto puede ser una ventaja a la hora de crear y descubrir nuevas formas de trabajar, pero también puede resultar un fracaso si se toma la decisión equivocada.
Resistencia
Levantarse temprano después de una reparadora noche de sueño debería ser perfecto para conseguir más resistencia y ser un corredor de fondo pero... aunque los resultados de los test del tiempo de reacción que se hacen a la hora de despertarse son mejores en las alondras, los búhos les ganan porque a las 10 horas de que sonó el despertador siguen estando activos y dan buenos resultados hasta avanzado el día. Al final, el búho aguanta el tipo y no baja la guardia, aunque se despierte adormilado.
Felicidad
Aquí ganan las alondras, pues los búhos no son muy sociables en el horario de vida normal de 9 a 5 en el colegio, universidad, trabajo o la vida diaria, mientras las alondras son la 'alegría de la huerta'. Esto lleva a que los búhos sean más propensos a desarrollar ansiedad, depresión e incluso problemas de adicciones.
La sociedad en general se ha organizado con el horario de alondra, por lo que a los búhos nos toca ser considerados huraños, raros y escurridizos, aunque saquemos a relucir nuestros mejores momentos cuando nadie nos ve, en casa por la noche. Tanto es así que las alondras tienen más materia blanca en el cerebro, con una mejor comunicación entre las células nerviosas,También tienen más niveles de hormonas del buen humor: serotonina y dopamina, lo que explicaría porque las alondras suelen ser consideradas como personas más sociables y simpáticas, más optimistas y vitales.
Según el artículo de Huffington Post, el resultado ante un combate 'Búhos frente a Alondras' sería:
- Inteligencia: Empate
- Encanto: Alondras
- Creatividad: Búhos
- Resistencia: Búhos
- Felicidad: Alondras
- Resultado: Empate
No sé que pensáis vosotros, a mi me encaja bastante el tema, pero a lo largo de los años he ido desarrollando estrategias para activarme por la mañana, especialmente en el trabajo, competiciones o en reuniones importantes como:
1. Entrenar temprano en ayunas. Como no tomo café, me bastan 20 minutos de carrera, rodillo o nado suave antes del desayuno para sentir que mi cabeza y cuerpo se despiertan. Así puedo desayunar si el día se presenta largo y complicado o puedo ir desarrollando ideas para los artículos que debo entregar a primera hora, o las reuniones de trabajo en las que debo estar muy despierta a primera hora.2. Terminar la ducha con agua fría. Es un método drástico, especialmente en invierno, pero muy eficaz.
3. Utilizo aceites esenciales energizantes como pomelo, eucalipto, romero, tomillo, pimienta negra, menta, etc. El olor va directo al cerebro y activa las neuronas dormidas. Bastan unas gotas diluidas en aceite de almendras colocadas detrás de las orejas o llevo un botecito a mano para oler cuando me hace falta. A mi me funciona y me gusta el olor.
4. Desayuno mínimo y energizante. El hambre me activa, así que como no me levanto con ganas de comer, me tomo el zumo de un limón recién exprimido con una rodaja de jengibre espolvoreada con pimienta negra. Es olor y sabor ácido con el picante es activador del metabolismo y pone en marcha el sistema digestivo y excretor. Lo que se traduce en que al cabo de media hora empiezo a notar hambre, me hago pis y mis neuronas están despiertas en busca de alimento ¡y un baño si me pilla en un atasco!
5. Yoga o circuito de 10 minutos de ejercicios funcionales como fondos, sentadillas, zancadas, burpees, plancha, etc. El yoga me va mejor por la noche, pero cuando estoy muy dormida, lo de ponerme a dar saltos me cuesta y me puede provocar una lesión, así que unos minutos de 'saludo al sol' para calentar y empezar el día respirando correctamente, ordenando las ideas me va bien. Si además me da tiempo al circuito de ejercicios, en 10-15 minutos mi cabeza está completamente despierta y mi cuerpo está preparado para la acción diaria con los niños, el trabajo, los entrenos y lo que haga falta.Y vosotros ¿qué sois búhos o alondras? ¿Qué estrategias tenéis para contrarrestar vuestra naturaleza madrugadora o trasnochadora? Me interesa mucho vuestra opinión, espero que podáis compartirla con todos en los comentarios del facebook de este blog, abajo.
Y os dejo un vídeo que resume en inglés lo de ser alondra o búho:
https://www.youtube.com/watch?v=BPJ0729NVjw
Esta youtuber se está volviendo viral con su método para despertarse más temprano. Yo no probaría su método... no creo que me fuera muy bien.
https://www.youtube.com/watch?v=S8DySNKCIj0
