Me niego a aceptar que sea incompatible el mountain bike y amar a la naturaleza

Vivo desde hace 25 años en Cercedilla, un pueblo de montaña al pie de la Sierra del Guadarrama. Un paraje que me enamoró desde la primera vez que vine para montar en mountain bike. Con la perspectiva que me da este cuarto de siglo de verdad que no entiendo la persecución de la Comunidad de Madrid contra los que montamos en bici (ampliable casi a cualquier actividad deportiva).

Fran Chico

Me niego a aceptar que sea incompatible el mountain bike y amar a la naturaleza
Me niego a aceptar que sea incompatible el mountain bike y amar a la naturaleza

Ya está en trámites para ser aprobado el proyecto de regulación del Parque Nacional que va prohibir de facto la circulación en bicicleta por la Sierra de Guadarrama. No se podrá ir en bici por ninguno de los senderos de uso público (que muchos de ellos no se han perdido gracias a que pasamos con las bicis) y sólo dejará algunas pocas pistas para pedalear todas de más de 3 metros de ancho (con algunas cosas de locos como permitir el paso por una pista, prohibirlo en la zona intermedia para luego volver a permitirlo). Las bicis eléctricas quedarán limitadas a salidas en grupo organizados por empresas (curioso que se pongan en Madrid para cuidar el medio ambiente y por lo mismo se prohíban a 60 km).

Está claro que la preservación del monte es lo prioritario, que la cercanía de un gran urbe como Madrid pone mucha presión sobre este espacio natural pero no es incompatible con el uso deportivo. Es la medida más sencillo. ¡Pongamos vallas por todo la Sierra! Podrían usar la misma fórmula para frenar el repunte de las víctimas de tráfico. Como hay conductores que van borrachos, drogados o que conducen con el móvil aunque se ponen mil anuncios para evitarlo y las multas tampoco funcionan…¡prohibamos los coches!

Es como lo de limitar las carreras de trail Running a 450 participantes. ¿Por qué 450? ¡Pero si hay veces que se limita a 450 por senderos que en días normales pasan 3000 senderistas! Si daña la naturaleza el paso debería limitarse todos los días a partir de 450 personas...Porque lo que ya no hay quién se crea es que sea diferente el  desgaste entre una persona corriendo o andando por una pista o un sendero.

Hay mucho trabajo por hacer. Empezando por cuidar los caminos involucrando a los grupos de ciclistas, a marcar circuitos por la Sierra de Guadarrama de diferentes niveles técnicos y atractivos para que se usen sólo estos y nadie de salga de esos caminos, actividades juveniles para acercar (no alejar) a las nuevas generaciones a los montes para que los conozcan que es el primer paso que los protejan…

Yo me niego a que por querer montar en bici ya seas un enemigo de la naturaleza. ¿Qué voy a querer yo más que proteger ese bosque en el que quería un día montar en bici con mis nietos?  Me resisto a aceptar cuando hablan de los argumentos de los “ecologistas”. ¿Somos nosotros menos ecologistas?

Creo que los ciclistas de montaña hemos ido cediendo parte de nuestro derecho a disfrutar de nuestro deporte sin hacer gran cosa pero ha llegado el momento de dar un paso adelante. Un primer paso es firmar esta petición para que los políticos madrileños respondan (https://www.osoigo.com/es/acciones/asamblea-de-madrid-si-a-la-bici-en-guadarrama.html