El adiós a Enrique Barba, el pequeño gran capitán del waterpolo

Hoy me ha pasado eso de que lo urgente no deja hacer lo importante. He estado de acá para allá, pero no quería acostarme sin rendir mi pequeño tributo a un gran deportista de sólo 16 años que nunca conocí y me quedaré con las ganas de hacerlo.

Fran Chico

Enrique el día que con 15 años se convirtió por un día en capitán del Canoe. ¡Qué gesto tan emocionante!
Enrique el día que con 15 años se convirtió por un día en capitán del Canoe. ¡Qué gesto tan emocionante!

Enrique Barba nunca fue internacional ni profesional del deporte pero sin embargo a mi su historia me emocionó y me impacto como si hubiera logrado un título mundial. Era un gran deportista, un chico lleno de vida amante del deporte y en especial del waterpolo, pasión que le unía aún más a sus hermanos Fran y Santiago, los tres jugadores de esa gran institución del deporte madrileño que es el Real Canoe N. C..

Yo nunca había oído hablar de Enrique hasta que hace unos meses, ya en plena lucha contra el sarcoma de Ewing, el tumor maligno que afecta a los huesos y que le ha acabado arrebatando la vida, el Canoe decidía a sus 16 años nombrarle por un partido capitán del equipo en una jornada de la División de Honor, frente al Molins. Enrique no sólo lideró por un día a sus mayores sino que incluso marcó un gol de penalti.

La tarde noche del martes, con sólo 16 años, el Canoe perdía a "su capitán". Enrique luchó con la entereza que sólo tienen los grandes deportistas contra la enfermedad. No pudo ganar el partido pero a todos, incluso a los que nos quedamos sin conocerle, nos deja su ejemplo.

En mi nombre, y en el de todos los que hacemos Sport Life, nuestro más sentido pésame a su familia, a sus amigos y a su otra familia, la del Canoe. Hoy esa piscina que tanto le vio disfrutar a Enrique rebosa un poco más, tiene el agua de siempre y algunas lágrimas más,