También se entrena el coraje

Supongo que todos tenemos atletas de referencia que nos sirven de inspiración con sus hazañas, sus victorias, sus proezas. En mi caso, cuando realizo algún triatlón, siempre he tenido especial admiración por Javier Gómez Noya, no solo por ser doble campeón mundial, sino también

Domingo Sánchez

Entrenando el coraje
Entrenando el coraje

Supongo que todos tenemos atletas de referencia que nos sirven de inspiración con sus hazañas, sus victorias, sus proezas. En mi caso, cuando realizo algún triatlón, siempre he tenido especial admiración por Javier Gómez Noya, no solo por ser doble campeón mundial, sino también porque coincidí con él varias veces y es una persona tan humilde como grande en su trayectoria. Siempre le he tenido especial admiración como deportista y persona, así que cuando tengo pereza para entrenar, visualizo algunas de sus competiciones, su forma de entrenar y me sirve de motivación.

Entrenando el coraje

Críticas aparte, un día Josef Ajram, se proclamó campeón del Epic 5 en Hawái, una prueba que consiste en realizar 5 Ironman en 5 días consecutivos, Josef realizó un total de 19 Km de natación, 900 Km de bicicleta y 210 Km de maratón y todo en 59 horas y 50 minutos, ésta es la hazaña conseguida por el catalán, suma a su palmarés uno de los broches más preciados entre las pruebas de gran resistencia. Pensando en lo que este chico tuvo que soportar, y lo comparo con mi situación en esos momentos que siento fatiga, veo lo pequeña e insignificante que es mi situación comparada con su hazaña. Pienso que este tío no es humano, soportar no solo ese nivel de exigencia en una prueba, sino el tiempo, esfuerzo y dedicación que tiene que invertir para llegar a terminar una prueba de ese nivel, es algo que solo contadas personas en este Mundo pueden llegar a alcanzar. Ese estado de forma y de exigencia es algo que solo está al alcance no solo de personas con una condición física sobrehumana, sino con una fortaleza mental a la altura de las capacidades físicas.

Entrenando el coraje

Pensar que al bajarte de la bici, aun te queda una maratón, y que al terminar la prueba de ese día, tienes que volver a realizar una más, y otra… y otra… no sé yo si hay que estar muy bien de la cabeza, pero lo cierto es que si este chico mentalmente puede superar este tipo de pruebas, poco en la vida le puede superar a nivel emocional o mental. En este tipo de atletas, los límites mentales se encuentran mucho más lejos de los límites físicos, cuando su cuerpo dice “no puedo" aparece ese estado emocional que le dice “ahora no es momento de parar, un kilómetro más"

Pensé que pocas cosas podrían causarme tal nivel de admiración, pero lo cierto es que, hace unas semanas vi una situación, que superó muchas de las hazañas de deportistas que tenía en mi recuerdo. Y no fue precisamente por la marca conseguida, el tiempo empleado o la distancia recorrida, fue por una cuestión que en muchas ocasiones marca la diferencia entre un buen deportista y un atleta excepcional, me refiero al coraje. Hace unas semanas tuvo lugar el Campeonato del Mundo de Triatlón Cros en el complejo El Anillo de Extremadura. Lo excepcional de esta cita no fue el campeonato, sino la competición de discapacitados que se realizó en el mismo recorrido. Ver a atletas ciegos, con un solo brazo e incluso con una sola pierna, terminando la carrera con muletas, viendo cómo se levantaban una y otra vez después de las numerosas e inevitables caídas, te hace pensar la fortaleza mental de la que disponen, no solo para terminar una prueba tan exigente, sino todas las barreras, límites y limitaciones que han tenido que superar a lo largo de su vida.

Entrenando el coraje

Cuando nos da pereza comenzar el entrenamiento, cuando nos sentimos fatigados después de varios kilómetros, simplemente cuando piensas “no puedo" es el momento de pensar en estas personas, capaces de superar verdaderos límites físicos y grandes limitaciones psicológicas, por encima de todo ello surge el coraje, una fuerza mental y valentía emocional, para proponerse no ser como el resto, pero sí de intentarlo, ya que el fracaso no está en no ser capaz de conseguir un objetivo, sino en no intentarlo. Deberíamos aprender de estos verdaderos héroes desconocidos y anónimos.

Entrenando el coraje

A veces pensamos en esos grandes deportistas como Gómez Noya o Josef Ajram, pero lo cierto es que ellos están en otro nivel, sus capacidades físicas son de otro planeta, y compiten a un nivel muy alejado del resto de mortales y mataillos que como yo, nos dedicamos a simplemente terminar alguna prueba. Deberíamos pensar en cómo personas de nuestro nivel e incluso inferior son capaces de afrontar un reto como entrenar y terminar un triatlón cross con un solo brazo, un hemicuerpo o totalmente a ciegas.

Mi admiración a todos esos héroes anónimos que día a día y durante toda una vida, tienen que superar sus limitaciones poniendo de manifiesto sus límites. Gracias por enseñarme a pensar “sí que puedo", gracias por esta lección de entrenamiento emocional.