El pasado 12 de Septiembre tuve la oportunidad de participar en la primera edición del “TriStar200 desafió Doñana". La marca TriStar surge como una alternativa al mítico Ironman, con un amplio rango de competiciones dentro de la modalidad del triatlón, pero en este caso, orientados a una participación mas popular y menos profesional que el formato Ironman. Como representante de la revista, la organización se prestó a ofrecerme una inscripción a este evento único para que viviese esta aventura del deporte de ultradistancia desde dentro.
El origen.
El TriStar 200 Desafío Doñana, ha sido el evento inaugural de esta nueva línea de eventos que pretende ser una referencia a nivel mundial. Presenta una filosofía nueva, con un enfoque abierto, agradable y relacionado con obras de beneficencia y acciones medioambientales.
Este primer TriStar200 Andalucía, ha unido a las provincias de Cádiz y Huelva en un recorrido único y excepcional. Por primera vez en la historia, un evento deportivo se ha desarrollado cruzando de lado a lado el Parque Nacional de Doñana, una de las más importantes reservas ecológicas.
Además de este marco incomparable, el evento ha variado el orden de los segmentos clásicos del triatlón, comenzando con el sector de ciclismo en la provincia de Cádiz, continuando con la natación atravesando el Rio Guadalquivir, para finalmente, correr hasta la meta por la arena del Parque Nacional de Doñana. Todo un desafió de supervivencia.
El día de la prueba.
Ya despertarse fue toda una aventura ya que la organización nos preparó un desayuno a las ¡¡04:30 de la madrugada!!, el autobús salía a las 05:30 y todos los corredores debíamos estar en la salida a las 06:30 para los últimos ajustes a las bicis.
La salida se ubicó en la Plaza de España de Cádiz a las 07:00 de la mañana. A modo de salida neutralizada, el pelotón ciclista rodamos a lo largo del casco histórico de Cádiz. A partir de aquí nos quedaban los 169 km en bicicleta por toda la provincia de Cádiz.
La primera hora de carrera, se realizó en plena oscuridad, todos vimos amanecer mientras pedaleábamos, aunque con cierto fresco, la sensación fue incomparable; grupos de ciclista y los primeros colores del amanecer de fondo.
Durante los primeros kilómetros, el gran pelotón formado por 210 participantes se fue dividiendo en pequeños grupos donde el drafting estaba permitido. Así se fue rodando por ciudades y pueblos como San Fernando, Chiclana, Medina Sidonia, San José del Valle, Jerez de la Frontera, El Puerto de Santa Maria, Rota y Chipiona.
A partir del kilómetro 120 la falta de adaptación a este tipo de distancias fue haciendo mella en mi condición física, aparecieron los primeros calambres musculares y aunque la hidratación y avituallamiento no faltó en todo el recorrido, el calor y la falta de adaptación como en mi caso, comenzaron a afectar a muchos corredores.
A las 5 horas y después de recorrer los 169 km del primer sector, llegué a Sanlucar de Barrameda, los primeros en llegar lo habían hecho en solo 4 horas.
Tras quitarte la ropa de bici y colocarte el bañador, esperaba el segmento de natación que consistía en cruzar el Rio Guadalquivir con una fuerte corriente, para llegar a la otra orilla ya en provincia de Huelva. Los pasos hacia la orilla eran torpes y las molestias en los ísquiones y zona cervical evidentes. El contraste de la temperatura menor del agua fue agradable durante los primeros metros, ya que poco después, en mi caso aparecieron los temidos calambres. Comenzaron por los gemelos, para continuar con los isquiotibiales y cuadriceps, en este estado me resultó imposible continuar la prueba y la lancha de la Cruz Roja me “invitó" a llevarme a la orilla, mi aventura como participante, terminó en este sector. Terminé cubriendo el resto de la prueba con un autobús todoterreno que la organización tenía disponible para prensa. La mayoría de participantes que lograron atravesar el río lo hicieron en poco menos de 30 minutos, auténticos monstruos, como Marcel Zamora, tan solo invirtieron 11 minutos.
Los 30 km de carrera a pie tuvieron lugar en el Parque Nacional de Doñana, una carrera por la arena de playa, bajo un sol de castigo hasta llegar a la playa de Matalascañas
El español Marcel Zamora, cuatro veces campeón en el Ironman de Niza, segundo en la general, fue el primer español en cruzar la meta de esta primera edición que estamos seguros de volver a intentar finalizarla en su próxima edición.
[caption id="attachment_122" align="alignleft" width="150" caption="Al final de la prueba una charla interesante con Marcel Zamora, todo un campeón!!"]
Y lo mejor… el abituallamiento final, gambas y como no una visita a las míticas bodegas de Jerez, un 10 para la organización. |