Así te cura el mar

El mar es el balneario más completo y económico para poner tu salud a tono

SportLife

Así te cura el mar
Así te cura el mar

1. Aumenta la capacidad respiratoria

Lo primero que se nota cuando llegas a la orilla del mar es cómo empiezas a respirar con más facilidad, y si respiras mejor llega más oxígeno a los músculos para trabajar más eficientemente. La combinación de humedad elevada, temperatura y baja presión atmosférica mejora la capacidad respiratoria y aumenta la oxigenación. Además se ha visto un aumento del 10% en el número de glóbulos rojos.

2. Aumenta la potencia y la fuerza muscular

El agua y el oleaje relajan y tonifican los músculos según te lo montes: si vas en plan pasivo sólo tienes que sentarte en la orilla y dejar que las olas hagan el trabajo. Si lo tuyo es ir de activo, dedícate a andar o correr por la orilla para vencer la resistencia del oleaje. Cualquier movimiento realizado en el agua obliga a los músculos a trabajar, con la ventaja de que no fuerza las articulaciones y previene lesiones.

3. Relajante y anti-estrés

Al llegar a la orilla del mar basta con 5 minutos mirando el horizonte para notar el efecto anti-estrés y relajante del mar. El mar actúa sobre todos los sistemas y órganos del cuerpo y favorece el equilibrio del sistema vegetativo, provocando una sensación de bienestar general, que también aleja la depresión leve y estimula el optimismo. Si además te sumerges también consigues un efecto relajante en la musculatura que favorece el descanso y mejora la calidad del sueño.

4. Anti-gravedad

Cuando te bañas en agua de mar tu cuerpo pesa 8 veces menos, por lo que el corazón trabaja menos. Este efecto es muy recomendable para las personas con sobrepeso que no pueden hacer deporte por el riesgo de lesionarse y que pueden ejercitarse en el agua sin riesgos. También es muy bueno para las embarazadas que pueden hacer ejercicios en el agua sin sentir el pesoextra y sin riesgo de caídas.

5. Analgésico y anti-inflamatorio

No te lo creerás hasta que no lo pruebes, pero la mejor manera de evitar las agujetas después de un esfuerzo intenso es darse un baño en aguas frías como las del Atlántico. Lo probamos en Sport Life después de correr el maratón de San Sebastián en noviembre, y desde entonces no perdonamos el baño, aunque sea metiendo cubitos de hielo en la bañera con sal gorda.

La combinación del frío analgésico con las sales recuperadoras y el masaje del oleaje son la mejor terapia para tus músculos doloridos. El baño de mar también es un eficaz diurético, favoreciendo la eliminación de los líquidos retenidos y disminuyendo el edema o inflamación.

6. Cicatrizante y dermatológico

La práctica de deportes al aire libre no te libra de alguna caída de las que te dejan marca, y es que la abrasión con el suelo provoca una quemadura que en muchos casos tarda en curar. Lo primero es evitar la infección y la inflamación y seguro que alguna vez has comprobado que a pesar del picor, las heridas mejoran notablemente al bañarte en el mar, cicatrizan antes y no se infectan. Eso sí, no debes exponerlas al sol: protege las heridas de los rayos UV para no entorpecer el proceso de cicatrización porque tu dermis carece de la protección en forma de piel. La problemática psoriasis, el acné, la descamación... también mejoran con el agua de mar, siempre que se mantenga la precaución de foto-proteger la piel contra el sol. Los baños de mar también tienen un efecto muy beneficioso para prevenir y mejorar las infecciones por hongos, como el pie de atleta o las candidiasis vaginales.

7. Adelgazante

En presencia de yodo aumenta el metabolismo basal, al actuar este mineral sobre el tiroides, una glándula que regula la producción de energía para funcionar. En el mar es más fácil quemar las grasas extra, especialmente si haces ejercicio cada día, y te cuesta menos perder peso.

8. Fortalece los huesos

En el agua de mar se encuentran disueltas pequeñas cantidades de calcio y fósforo que pueden penetrar a través de la piel y fijarse a los huesos, aumentando la densidad ósea y ayudando a prevenir la osteoporosis.

9. Estimulante de la circulación

La presión y la temperatura del agua de mar ejercen un masaje gradual que favorece el retorno venoso, pues la presión es mayor cuanto más sumergido esté el cuerpo y hace que la sangre fluya desde los pies al tronco superior. Los baños de mar con el cuerpo sumergido hasta el cuello ayudan a aliviar los problemas de piernas pesadas, varices, compresión, etc. Provocados por la mala circulación sanguínea.

10. Aumenta las defensas

Después de una cura de mar aumenta la cantidad de glóbulos blancos o leucocitos, que se encargan de defender nuestro organismo del ataque de los agentes infecciosos. Unas vacaciones al borde del mar son la mejor vacuna anti-gripal para pasar el invierno sin mocos.

11. Afrodisíaco

No hay una explicación clara pero nacen más niños después de las vacaciones en la playa. El relax de las vacaciones, los aires de mar, los baños de mar con poca ropa, las noches locas, etc, dan la combinación perfecta para que el órgano sexual por excelencia, el cerebro, tenga un espacio para desarrollarse y tiempo para disfrutar de las relaciones sexuales.