Entre los diferentes frutos secos que podemos adquirir, las nueces se encuentran entre los más populares. A fin de cuentas casi todos conocemos aquello de que un puñado de nueces al día tiene una repercusión muy positiva sobre nuestra salud cardiovascular. Eso sí, existen otros beneficios en el consumo de este alimento.
Veremos a continuación 5 propiedades de las nueces que resultan beneficiosas para cuidar tu salud.
Algunas de las mejores propiedades de las nueces
Ricas en ácidos grasos insaturados: rechazar el consumo de alimentos con grasas es un error de base en nuestra alimentación. Realmente, deberíamos fijarnos en el tipo de grasas que nos aportan los alimentos. Si se trata de grasas insaturadas, como las que aportan las nueces, los beneficios para nuestra salud cardiovascular serán claros, ya que mejoran los niveles de colesterol y previenen ciertas enfermedades del corazón.
Ácido fólico: las nueces cuentan con un contenido importante de ácido fólico, bueno para la fertilidad de hombres y mujeres, pero también para los deportistas. El folato nos ayuda a mantener nuestra energía, reduciendo la fatiga y mejorando el rendimiento. Si lo combinamos con vitaminas del grupo B obtendremos mejores resultados.
Alto contenido en potasio: para nuestro mantenimiento muscular, uno de los minerales más importantes es el potasio. Y es que en 100 gramos de nueces encontramos 690 mg de potasio. Consumir las cantidades diarias recomendadas de dicho mineral nos puede ayudar a mantener la hidratación celular, a evitar calambres y a frenar el desgaste muscular.
Previene la osteoporosis: el calcio no solo lo encontramos en los productos lácteos. De hecho, los frutos secos también suelen ser una buena fuente de este nutriente, entre los que encontramos a las nueces. El calcio es importante a cualquier edad, no solo en la infancia para ayudarnos con el crecimiento. En la edad adulta también nos puede ayudar a mantener jóvenes y fuertes nuestros huesos, previniendo ciertas enfermedades relacionadas, como la osteoporosis.
Ricas en fósforo: el fósforo está relacionado con la memoria y otras funciones cognitivas, sin embargo, lo que poca gente sabe es que, junto con el mencionado calcio y con el magnesio, el fósforo se localiza en los huesos y es importante para su mantenimiento. Además, también nos aporta energía y nos puede ayudar con nuestro rendimiento deportivo.