El soriano Dani Mateo es un hombre polifacético. Atleta olímpico, compagina su carrera deportiva con su trabajo como ganadero dedicado a la gestión, administración y alquiler de granjas. En su vida personal, atraviesa un momento muy dulce disfrutando de los primeros meses de su primera hija.
Pero eso no es todo. Dani Mateo vive un idilio muy especial que le ha llevado los últimos años a viajar hasta la isla mágica para participar en el Santa Eulària Ibiza Marathon. Este año no será diferente y, el próximo 13 de abril, estará en la línea de salida de la 22K para tratar de batir su propio récord: 1:09:41.
Dani, dicen que eres un enamorado de Ibiza, ¿qué es lo que más te seduce de la isla?
Es cierto. Creo que hay algo especial. Yo diría que es por sus gentes y su forma de ser. Es gente que disfruta con las visitas, como nosotros aquí, y que nos tratan como si fuéramos de la familia. Además, es maravilloso que alguien como yo, que no ha pisado una discoteca en su vida, sea feliz allí y se sienta como en casa. Y eso es porque hay muchas posibilidades.
¿Recuerdas la primera vez que participaste en el Santa Eulària Ibiza Marathon? ¿Qué te llevó a decir SÍ voy aquella primera vez?
¡Claro que me acuerdo! Porque cualquier evento en Ibiza con el nombre que tiene te atrae. Una vez allí, descubrí una Ibiza distinta, desconocida, con una gente excepcional, unos parajes sorprendentes… Antes de ir piensas que es solo playa, pero no, hay mucha diversidad. Dije sí, porque lo que más me gusta es correr y con el nombre que tiene Ibiza la atracción era máxima.
Este año el Santa Eulària Ibiza Marathon batirá su récord de participación, ¿qué es pata ti lo mejor de este evento?
Para mí es mucho más que una carrera. Lo veo como un fin de semana excepcional, en un evento con una organización que llama la atención (3 salidas y una meta) y te ofrece un recorrido que te hace descubrir lugares muy bonitos a nivel cultural y con gran riqueza natural, desde la playa al bosque o la montaña.
Normalmente viajas hasta esta prueba en familia y es algo que se repite en buena parte de los participantes, ¿crees que la prueba está diseñada para vivirla o compartirla en familia?
Si, a la gente les digo que no es la carrera, que es pasar unos días preciosos en Ibiza y encima puedes hacer lo que te gusta: correr. En nuestro caso particular, es nuestra prueba favorita, porque en esa época el clima en Ibiza es muy suave y se está muy tranquilo.
Tu objetivo en la 22K, ¿pasa por marcar un nuevo récord?
Esperemos a esas fechas y ver qué estado de forma tengo. El año pasado con el atleta Carlos Diaz corrimos mucho y creo que va a ser muy difícil. Pero lo intentaremos.
¿Cuál es el tramo más duro de la 22K? ¿Y el que recuerdas con más cariño?
El principio. Son toboganes y cuesta coger ritmo, pero es favorable. Además, vas por medio de un pinar y es totalmente inesperado, por lo que es muy agradable. Después, los últimos kilómetros son preciosos, porque pasas por la zona de Es Canar y hay una vista maravillosa a la bahía de Santa Eulalia hasta llegar a la meta: una inmensa alfombra azul con el mar a la izquierda.
Y fuera de lo deportivo, esta será para ti una edición muy especial, ¿no es así?
¡Lo es! Hemos elegido el sitio ideal para que mi niña, que por esos días estará a punto de cumplir 9 meses, viaje por primera vez en avión, se meta en el mar.. Va a ser un cúmulo de circunstancias… ¡nos hace mucha ilusión! Una pena que aún no ande para poder correr la carrera para los niños, la Santa Eulària Ibiza Kids Run, que se celebra el sábado por la mañana.
