La Brooks Glycerin 13 al igual que algunas hermanas de marca puede presumir de no haber cambiado. Esto desde luego no es motivo de orgullo para ninguna marca y más cuando todas tus rivales han sufrido profundos cambios pero precisamente puede presumir de no haber cambiado por una sencilla razón: Funciona. En realidad la profunda metamorfosis de la Glycerin vino de la mano de la novena edición que ya encontró un chasis para muchos corredores perfecto. Desde entonces simplemente ha ido incorporando mejoras técnicas pero manteniendo a groso modo el mismo esquema. Esta nueva edición tiene un argumento más para no arriesgar y es que la antecesora ha sido un modelo con una gran acogida. Aun así el marketing y el mercado mandan así que toca retocar el buque insignia.
OBJETIVO CLARO
Desde luego no hay que ser un ente luminoso para saber en que fallaba la Glycerin 12 que a su vez había puesto énfasis en corregir el mismo defecto en la versión 11. En buena parte lo había conseguido pero no totalmente, algo que cuando se aspira a la perfección no cabe. En efecto hablamos de los problemas de upper. En la versión once se pueden valorar como catastróficos ya que gran parte de las unidades vendidas fueron jubiladas anticipadamente por roturas del upper. La Glycerin 12 ya rebajo esta cifra y apenas unos despegues sin demasiada importancia en el funcionamiento de la zapatilla pero si feos a nivel estético enturbiaban una zapatilla por lo demás excelente. En esta nueva versión como he dicho no hay cambios pero si un objetivo muy claro: acabar con los problemas de upper.
DE ARRIBA ABAJO
Lógicamente a la hora de analizar esta nueva Glycerin hay que comenzar por su upper. Desde el primer vistazo desde luego queda claro que a quien sea se le ha colmado la paciencia y ha tirado una base textil muy tupida, un tanto insólita últimamente. Las virtudes son evidentes de este tipo de uppers pues tienden a romperse menos. Los inconvenientes en teoría son un mayor peso y una menor ventilación. Al respecto de pros y contras siento no aclarar demasiado pero sí puedo decir que tras un mes y medio dándole palizas y con unos pies bastante juguetones mi unidad no se ha roto; objetivo conseguido. En cuanto a la ventilación soy sevillano y es quizás por ello que aunque sufro altas temperaturas lo cierto es que también me adapto. Para yo notar calor con una zapatilla es que lleva el upper bañado con uranio empobrecido. En cuanto al peso seguramente suponga unos gramos de más pero siguen compensando porque el sistema 3D Print (impresión en 3D) es lo más avanzado y ahorra materiales. En definitva que con que no se rompa ya vamos por buen camino porque sus muchas bondades ya se dan por hechas en unas zapatillas de esta categoría. En la media suela protagonismo casi absoluto para el Super DNA que para refrescar la memoria es un material de amortiguación cuya principal característica es que se comporta de diferente manera según sea nuestra velocidad de impacto variando de más blando a más duro según necesidades. A él se una pequeña capa del compuesto S-257 un derivado de la EVA que implementa la amortiguación y la flexibilidad. En cuanto a la construcción de la media suela destaca la segmentación de esta en decenas de columnas muy biseladas que aseguran un gran tacto. En la suela como siempre un gran trabajo pero apostando como siempre por la durabilidad aunque sin dejar en el tintero ninguna otra cualidad. Tiene un grip claramente pensando para el asfalto con los clásicos tacos muy pegaditos y de un tacto blando aunque de cierto grosor. Las estrías que hacen de guía de pisada aumentan su volumen ligeramente buscando un tacto más blando. Por buscarle las cosquillas diremos que debido a su configuración sobre arenilla suelta a altas velocidades le falta tracción.
CONSTRUCCIÓN Y MARCHA
Aunque no es novedad desde luego vale la pena comentar la construcción de la Glycerin porque es ciertamente peculiar. Yo había probado las Transced que fue la que la estreno y me pareció muy acertada para controlar la pronación pero no esperaba tanta efectividad en un modelo neutro. La Glycerin rompe los esquemas de las zapatillas clásicas estrechando el talón hasta el mínimo y abriendo la zapatilla de ahí hacia delante. Para hacernos una idea sería algo similar a un pie de pato. Muy posiblemente el usuario tipo de la Glycerin no le vaya a suponer mucho y tan solo taloneé algo menos, que es la idea. Sin embargo y aunque quien escribe no sea un prodigio de la técnica cuando se les aprieta a ritmos alegres y a pesar de un dropp alto (una muestra más que este dato es menos relevante de lo que nos cuentan) y una enorme amortiguación en los metatarsos la zapatilla muestre cierta capacidad para moverse rápido. Esto no debe llevar a equivocación porque su terreno es el rodaje placido y sin pretensiones. Allí nos ofrece asiento de primera, mucho aplomo, amortiguación con tacto equilibrado y esperemos que esta vez sí la seguridad que nada va a fallar en muchos kilómetros.
En definitiva diríamos que la nueva Brooks Glycerin 13 es una zapatilla neutra tope de gama para corredores que hacen muchos kilómetros a ritmos medios y bajos preferentemente y que no pasen de 90 kgs.
Sus rivales: Adidas Adistar Boost 2, Asics Nimbus 17,Mizuno Enigma 5, New Balance 1080 V5, Saucony Triumph Iso.
Por Fernando Chacón
Gerente de Emotion Running Sevilla.
http://emotionrunning.com/
Probamos a fondo la BROOKS GLYCERIN 13
La Brooks Glycerin 13 al igual que algunas hermanas de marca puede presumir de no haber cambiado. Esto desde luego no es motivo de orgullo para ninguna marca y más cuando todas tus rivales han sufrido profundos cambios pero precisamente puede presumir de no haber cambiado por una sencilla razón: Funciona. En realidad la profunda metamorfosis de la Glycerin vino de la mano de la novena edición que ya encontró un chasis para muchos corredores perfecto. Desde entonces simplemente ha ido incorporando mejoras técnicas pero manteniendo a groso modo el mismo esquema. Esta nueva edición tiene un argumento más para no arriesgar y es que la antecesora ha sido un modelo con una gran acogida. Aun así el marketing y el mercado mandan así que toca retocar el buque insignia.
