*Este artículo es un extracto de Las Olas Contadas, un libro de 100 páginas a todo color escrito por Aitor Francesena y Hugo Sánchez cuyo objetivo es enseñarte a surfear de un modo práctico y divertido. Sumérgete en sus páginas a través de Hugo Francesena, un personaje creado por los autores para compartir los conocimientos, valores y experiencias que han adquirido durante su larga trayectoria por el mundo del surf. 15 €
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Si ya sabes nadar, estás listo para iniciarte en el surf. Eso sí, necesitas una tabla blanda y con buena flotación,
adecuada para empezar en este deporte, y tener siempre presentes algunas precauciones:
- Mantén controlada la tabla en los desplazamientos tanto dentro como fuera del agua y deja una distancia de seguridad de 4 o 5 metros con los demás surfistas.
- Al posicionarte, no te coloques nunca delante o detrás de ningún otro surfista para no interferir su trayectoria.
- Cuando ya logres ponerte de pie sobre la tabla, nunca te lances de cabeza al agua.
- Si te caes de la tabla, procura sumergirte completamente y salir del agua primero con los brazos, protegiendo la cabeza, para evitar que la tabla pueda golpearte en ella.
- Hidrátate bien y utiliza protector solar siempre, especialmente en verano. Usa también una camiseta de lycra que te proteja de los rayos solares y las rozaduras.
LA REMADA
Remar es la parte más dura del surf, pero resulta imprescindible para alcanzar el lugar que queremos y adaptarnos a la velocidad de la ola. Es primordial tumbarte correctamente sobre la tabla y remar largos recorridos para adquirir buena técnica.
Técnica correcta:
- Dedos juntos para que las manos funcionen como palas
- Pies juntos y sin meterlos en el agua
- Cuello erguido para observar mejor las olas
- Presionamos con el muslo contrario al brazo que rema para que la tabla no se balancee
POSICIÓN INCORRECTA
SENTARSE SOBRE LA TABLA
Esta posición nos permite relajar la zona lumbar, conseguir una mejor visión de las olas y realizar giros más rápidos y eficaces que desde la posición de tumbado
POSICIONES INCORRECTAS
¿Y SI ME ARRASTRA LA CORRIENTE?
No pierdas la calma, si te arrastra la corriente nunca nades o remes en su contra, intenta salir remando lateralmente en dirección a las espumas que te arrastrarán directamente hacia la orilla. Las corrientes actúan como pasillos de tracción, si te encuentras sin energía, déjate arrastrar hasta que pierdan su fuerza y relájate sin soltar la tabla hasta que te rescaten. Y, sobre todo, respeta las zonas acotada para surfistas para prevenir estos problemas.
En la imagen, las flechas cortas indican la dirección de la corriente. Las flechas largas te marcan hacia donde dirigirte para salir de la corriente.
¡EN PIE!
Si ya sabes remar y sentarte correctamente sobre la tabla, estás listo para tratar de ponerte en pie.
Lo primero es remar hasta colocarte en un punto en que la ola o la espuma puedan arrastrarte con energía. Si consigues adelantar la espuma o bajar la ola, ha llegado el momento de subirse a la tabla. Aunque para lograrlo es fundamental que practiques muchas veces previamente esta secuencia sobre la arena.
- No te acostumbres a agarrar los cantos de la tabla si las condiciones no son extremas, hace más difícil retirar los
brazos.
- Apoyando los brazos en los cantos e inclinando el peso del cuerpo en uno o en otro, conseguiremos que la tabla gire. Es una maniobra básica para evitar colisiones. Apoya el pie trasero en su totalidad, no la rodilla.
- Con un gran impulso de brazos, trata de llevar el pie delantero al centro de la tabla. Debe situarse entre los brazos y por debajo del pecho, nunca por fuera. De forma simultánea, retiraremos las manos de la tabla, elevando el pecho, abriendo paso a nuestra rodilla y facilitando así el apoyo.
- A mayor presión del pie delantero, mayor velocidad de la tabla. Si el peso se ejerciera sobre la pierna trasera, la fuerza de la ola nos lanzaría hacia atrás. Los brazos ligeramente flexionados a cada lado de la tabla y por delante del tronco ayudan al surfista a mantener el equilibrio y el peso delante.
Después de realizar repetidamente y de forma correcta la puesta en pie en las espumas (olas rotas) y de trabajar algunos cambios de dirección en ellas, pasaremos a bajar olas sin romper e ir en busca del escape o pared, la parte de la ola en la que se consigue la máxima velocidad.
Al ponernos en pie en una espuma, su fuerza nos arrastrará hasta la orilla; y en el caso de las olas sin romper, deberemos bajar una pendiente. Nos hallamos ante la situación más compleja en el proceso de aprendizaje del surf: dominar el miedo y la indecisión.
IMPORTANTE: Nunca debemos bajar tumbados en olas sin romper. Es muy peligroso, pues la punta de la tabla se hincará en el agua y saldremos despedidos.
BAJADA EN DIRECCIÓN A LA ORILLA Y AL PLANO DE LA OLA
Al llegar a la parte plana de la ola, le daremos a la tabla una inclinación de acuerdo con la dirección que queramos tomar.
De este modo, conseguiremos colocarnos en la pared o escape y, una vez en ella, aprovecharemos su energía realizando movimientos de subida y bajada cambiando la presión de un canto y mediante flexiones y extensiones de rodillas y caderas conseguiremos la máxima velocidad.
BAJADA EN DIRECCIÓN AL ESCAPE O PARED
Más velocidad, con subidas y bajadas mediante apoyos en las puntas y los talones.
Otra manera de coger el escape o pared consiste en remar lateralmente y ponerse de pie en dirección al escape.
