¡Vaya sí hay rutinas! Entre lunes y miércoles acumulo un buen puñado de horas en la Universidad de Elche. Las primeras en la redacción de mis artículos de investigación. En ocasiones como ayer, el lento avance con tablas de resultados, sus significaciones estadísticas y, sus ajustes de formato (que se lo digan a Raúl Reina), te hacen sentir como si no hicieras nada. Luego llega ese “break" fugaz, de escasos treinta minutos, hasta que me marcho a clases de inglés, donde vas exprimiendo la gramática con una clase muy heterogénea, en la que te puedes encontrar, desde otra compañera doctorando hasta estudiantes de cuarto de la ESO.
Del inglés al entrenamiento suave de los lunes y miércoles. Ayer diecinueve kilómetros a ciento cincuenta latidos, nada comparado con los diez kilómetros de hoy, más las veinte repeticiones de quinientos metros que completaré en la famosa recta del “Canalillo".
Tras mi entrenamiento de los lunes y miércoles en Elche, toca el turno de entrenar a mi nuevo grupo de runners. De momento trabajo de todo eso que yo no puedo hacer y, supone un reto explicar, como lanzamientos dorsales, multisaltos, pasos de vallas, etc. Gracias a los amigos de siempre, como Jesús, por prestarse de modelos excelentes para ilustrarnos con unos “squat throws" y todos sus similares.
Detrás del grupo de runners hay otro de “wheelers" o en silla de ruedas. Un granadino y dos norteamericanos, más un ciclista canario al que asesoro en temática de altitud. Luego tenemos al grupo de keniatas liderados por mi amigo “Silas Sang" al que acabo de comenzar a entrenar. Vaya si tienen nivel, con marcas por debajo de una hora en media maratón y otros con dos horas seis en maratón. Las pinceladas claves, la comunicación breve y las ayudas en optimización del rendimiento, con las modulaciones de altitud recomendadas hace ya unos años por referentes como Benjamin Levine y Stray-Gundersen. Qué beber y cómo hacerlo durante la prueba y la mejora de los elementos claves que mejoran el rendimiento en maratonianos bien definidos por Billat, Chapman,…
Entre medias, se encuentra mi preparación para la Maratón de Oita (Japón) en diecinueve días, las clases de valenciano los viernes por la tarde y los deberes de Daniela y Ana, más el resto de rutinas familiares.
La vida es un cúmulo de proyectos encadenados.
Santiago Sanz
@santirun
Santiago Sanz
Atleta y entrenador de runners
Ldo. Ciencias del Deporte
Msc “Máster en Ciencias"
Doctorando en Fisiología del ejercicio
Un proyecto de categoría infinita
¡Vaya sí hay rutinas! Entre lunes y miércoles acumulo un buen puñado de horas en la Universidad de Elche. Las primeras en la redacción de mis artículos de investigación. En ocasiones como ayer, el lento avance con tablas de resultados, sus significaciones estadísticas y, sus ajustes de formato (que se lo digan a Raúl Reina), te hacen sentir como si no hicieras nada. Luego llega ese “break" fugaz, de escasos treinta minutos, hasta que me marcho a clases de inglés, donde vas exprimiendo la gramática con una clase muy heterogénea, en la que te puedes encontrar, desde otra compañera doctorando hasta estudiantes de cuarto de la ESO.