25 de Septiembre, aniversario y reflexiones

Ayer fue mi cumpleaños y me escapé con Curris en bici a San Pere de Rodes desde Castelló d’Empuries. Para los que no lo conozcan, es una salida de pocos Kms (40 Km), pero con una fuerte subida de 7 Km en los que asciendes 550 metros. El día estaba radiante, el aire limpio, las vistas fantásticas. Fue una excursión ideal. Y es que Otoño es una época para disfrutar de la naturaleza y del deporte. No hace ni frío ni calor, las carreteras están más despejadas (ya no quedan turistas), los colores de la naturaleza te hacen disfrutar del paisaje. Todo está a favor. Después de la bici, baño de mar en la paya de St. Martí d’Empuries y una buena comilona, para dormir, después, la siesta en la paya.

Lourdes Torres

25 de Septiembre, aniversario y reflexiones
25 de Septiembre, aniversario y reflexiones

Ayer fue mi cumpleaños y me escapé con Curris en bici a San Pere de Rodes desde Castelló d’Empuries. Para los que no lo conozcan, es una salida de pocos Kms (40 Km), pero con una fuerte subida de 7 Km en los que asciendes 550 metros. El día estaba radiante, el aire limpio, las vistas fantásticas. Fue una excursión ideal. Y es que Otoño es una época para disfrutar de la naturaleza y del deporte. No hace ni frío ni calor, las carreteras están más despejadas (ya no quedan turistas), los colores de la naturaleza te hacen disfrutar del paisaje. Todo está a favor. Después de la bici, baño de mar en la paya de St. Martí d’Empuries y una buena comilona, para dormir, después, la siesta en la paya.

Y es que el deporte está para disfrutarlo, para dejar rienda suelta a la necesidad vital de moverte, de mirar de frente a las cosas, de darle vida al cuerpo. Y después, el descanso, la relajación, una buena comida, una conversación y unas risas.

¿Y los retos, el entreno y el “sufrimiento"? ¿Dónde quedan?

“Me alegro que me hagas esta pregunta…" Sí, es verdad, nos gustan los retos y ello requiere una cierta dosis de sufrimiento, pero no quita que podamos también disfrutar del deporte y no perder de vista que esto es lo más importante. Y aquí es cuando os digo que el método Phil Maffetone apuesta por el buen deporte y la buena vida.

Este año tengo algunos retos y voy a entrenar y, quizás, sufrir un poco, pero muy poco, porque las pautas de entreno seguirán siendo las mismas: el Método Phil Maffetone, pero controlada por quien más sabe de ello en España: Ester Galindo.

Ester lleva más de 10 años viviendo bajo el método Maffetone, lo conoce  muy bien, lo entiende, sabe mucho qué síntomas significan el qué, reconoce el método como algo totalmente adherido a su vida. El método Maffetone es un estilo de vida que se construye poco a poco, sabe que lo principal es mantener a raya al estrés, a tener unos hábitos de alimentación saludables, que el ejercicio se practique por “diversión", que el sobreentreno no lleva a ninguna parte que no sea la lesión y la lesión al estrés. Ester es la única persona autorizada para traducir sus libros al castellano, lleva años traduciendo sus artículos, capítulos de los libros de Phil, los mismos que hace un año y medio se vienen publicando en la Revista Triatlón. Conoce a Phil hace cuatro años. En el camino del método  no hay patrones, cada persona es diferente, cada persona tolera los alimentos de una manera y lo importante es que cada uno entienda lo que le va bien y lo que debe dejar de tomar. La conclusión es que con el método de Phil, nadie mejor que uno mismo para saber qué es lo que le conviene, aprender a distinguir, a seleccionar, a renunciar, no es fácil. La calidad sí es una diferencia grande y yo creo que el método de Maffetone te da principalmente una calidad de vida total.

Sant-Pere-de-Rodes Sant Pere de Rodes, al fondo el Port de la Selva

Curioso pero cierto, justo esta semana me he encontrado con amigos y que hacía tiempo que no nos veíamos y todos me preguntaron lo mismo: “Lourdes, ¿qué estás haciendo? Tienes un aspecto súper saludable" Parece que lo esté escribiendo aquí en el blog en plan marketing, pero ha sido real. Me oía explicándoles que lo principal que he cambiado ha sido el sueño, duermo cada día 7 horas pase lo que pase, ya puede venir el Papá de Roma que yo a las 22:30 estoy en la cama y a las 23:00 con luz apagada. Haber hecho este cambio a rajatabla y mantenerlo como religión me da mucho equilibrio. Como algo cada tres horas y procuro no estresarme, dar prioridad a lo que lo tiene, a lo que no va a la lista de cosas por hacer, y las hago pero en orden de prioridad. Y hago ejercicio, como mínimo, una hora  al día. Esto es la base, pero con mucha constancia, añadiéndolo a la vida como algo natural.

Todo parece muy idílico, pero también he de decir que la guerra al carbohidrato está allí, no acabo de ganarla. Ya le he dicho a Ester, que como le doy prioridad a no estresarme y desde verano hasta diciembre es muy complicado llevar una alimentación estricta, he decidido hacer seis meses y seis meses. Sé que es fundamental alimentarme de una mejor y más adecuada manera, pero eso lo haré de enero a julio y de julio a Diciembre daré un poco de rienda suelta al carbohidrato, alguna cervecita, algún panuco, en fin… Hasta que de manera natural estos alimentos que no me sientan tan bien, pero que los disfruto más que nadie, se vayan alejando progresivamente, sin traumas. No soy capaz de tener la disciplina de tener la vida social que se genera alrededor de una mesa y no participar, eso me genera mucho estrés y como el punto principal es mantener el estrés a rajatabla, pues me dejo ir un poco. En enero será otra cosa.

En fin, que empieza una nueva temporada en la que quiero seguir disfrutado del deporte y, si es posible, mejorar mis hábitos alimenticios. Ya os iré explicando.