La meta más difícil de alcanzar

Dice Yolanda que de dónde voy a sacar el tiempo para hacer las entradas en el blog. Y realmente tiene la razón, no tengo ni idea pero es que realmente me apetece mucho tener mi propio rincón en el ciberespacio en el que pueda escribir de lo que me apetezca sin el peso de representar a Sport Life o a cualquier de las otras revistas que tenemos "en la casa".

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La meta más difícil de alcanzar
La meta más difícil de alcanzar

Dice Yolanda que de dónde voy a sacar el tiempo para hacer las entradas en el blog. Y realmente tiene la razón, no tengo ni idea pero es que realmente me apetece mucho tener mi propio rincón en el ciberespacio en el que pueda escribir de lo que me apetezca sin el peso de representar a Sport Life o a cualquier de las otras revistas que tenemos "en la casa".


¿Voy a escribir de deporte? Claro que sí porque forma parte inseparable de mi vida, porque en realidad lo que quiero traer a mi blog es lo que me llame la atención, lo que me sorprenda, lo que me emocione o simplemente esa reflexión que tenga en la cabeza y sienta la necesidad de compartirla.
Trataré de ser ordenado y disciplinado a la hora de hacer entradas en el blog pero ya dudo mucho de que lo consiga porque ni el orden ni la disciplina nos dos cualidades que el "Pez Chico" diría de sí mismo.
Y como ilustración de mi primera entrada, una de mis fotos favoritas. Me lleva a las montañas de Escocia, a la isla de Skye, a una tarde lluviosa llena de mosquitos. El sitio era de cuento hasta el nombre, las Fairy Pools, pero aunque el paisaje era para no querer irte nunca, lo que me gusta de la foto es que se me ve simplemente feliz, que es la meta más difícil de alcanzar.