Al finalizar un ejercicio el organismo continúa con una actividad metabólica elevada hasta que vuelve a su estado de reposo absoluto, es lo que se conoce como EPOC (exceso de consumo de oxígeno postejercicio). El gasto calórico se mantiene elevado obteniendo la energía quemando la grasa corporal.
Este EPOC es directamente proporcional a la intensidad del ejercicio, por lo que los entrenamientos cortos pero intensos pueden conseguir un consumo calórico total más elevado que los entrenamientos continuos a baja intensidad.
Si tu objetivo es quemar grasa, no te estanques con el tradicional cardio continuo, introduce sesiones de HIIT, musculación o series de velocidad.
Tu sesión HIIT quemagrasas
En este ejemplo práctico diseñamos una sesión que alterna ejercicios de alta intensidad con otros moderados. El entrenamiento consta de un total de 10 ejercicios divididos en dos bloques con una recuperación de 60” entre cada bloque.
Repetir 3 veces los 10 ejercicios, el tiempo total de entrenamiento será de unos 20 minutos.
Tu sesión HIIT quemagrasas
En este ejemplo práctico diseñamos una sesión que alterna ejercicios de alta intensidad con otros moderados. El entrenamiento consta de un total de 10 ejercicios divididos en dos bloques con una recuperación de 60” entre cada bloque.
Repetir 3 veces los 10 ejercicios, el tiempo total de entrenamiento será de unos 20 minutos.
BLOQUE 1:
- Skiping en el sitio moderado: 30”
- Squat con salto y rodillas al pecho: 20”
- Salto comba: 30”
- Salto horizontal ida y vuelta: 20”
- Carrera tocando talones atrás: 30”
Recuperación 60” caminando
BLOQUE 2:
- Burpees: 20”
- Subir y bajar escalón: 30”
- Skiping tocando rodillas: 20”
- Salto lateral a una pierna: 30”
- Jumping Jack (abrir y cerrar piernas): 20”
Recuperación 60” caminando