El tupper se ha convertido en un aliado fiel para la conservación de las comidas. Estudiantes, trabajadores, deportistas... una gran parte de la población hace uso del tupper para facilitar el transporte de su comida desde casa, lo que implica: cocinar antes.
Es más, en muchas ocasiones, se suele aprovechar para preparar raciones más grandes para luego tener más comida y aprovecharla durante el resto de la semana. No obstante, esto puede suponer un gran problema. Según una encuesta de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), la mitad de los consumidores utiliza mal estos envases para guardar comida y tan solo el 47% sabe que estos plásticos pueden degradarse, especialmente cuando entrar en contacto con alimentos ácidos, grasas, o incluso al ser calentados o enfriados.
Más de la mitad de los consumidores desconocen que algunos envases podrían llegar incluso a liberar sustancias tóxicas si entrar en contacto con algunos alimentos.
Los alimentos que no debes guardar en un tupper si no quieres tener problemas de salud: atento a este símbolo
Atento a este símbolo en tus recipientes de plástico
Realmente el usuario no tiene por qué saber cuál es la composición de dicho envase porque de eso se debe encargar previamente la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria y nuestra legislación. Lo que sí necesitamos saber es cómo usarlos adecuadamente y es en este punto donde podemos estar fallando.
Recomendaciones para saber que el tupper es adecuado:
- comprar los envases en comercios que nos ofrezcan todas las garantías
- evitar las tiendas online poco fiables que no sabemos si pueden estar regulados o no
- evitar utilizar cualquier tupper si tenemos dudas sobre si el envase es adecuado
- buscar "el símbolo de la copa y el tenedor", el cual no es obligatorio, pero podemos encontrar de forma habitual.
- si no lo vemos o tenemos dudas de si es o no apto para guardar comida, lo mejor es no emplearlo
- evitar reutilizar los plásticos de un solo uso, ya que estos se van a degradar
- tampoco los que nos sirven la comida a domicilio
- desechar aquellos que estén deteriorados, agrietados o con manchas que no se quitan
- desechar aquellos recipientes que contentan aluminio, no deberían emplearse para usarse con alimentos muy ácidos o salados porque hay transferencia del aluminio por una exposición prolongada