Cuando hablamos de comer de forma saludable, puede que hayamos escuchado afirmaciones como esta:
Cuantos más colores variados incluyas en tu comida, más saludable y equilibrada será tu dieta.
Como ejemplo sería combinar alimentos de color rojo como el tomate, verde como las espinacas, amarillo como el pimiento, naranja como la zanahoria o azulado como los arándanos.
En la gran mayoría de casos, esta combinación procede de las frutas y verduras que mezcladas con otros grupos de alimentos, como los que contienen proteínas, grasas saludables e hidratos de carbono en su justa medida, compondrían una alimentación de lo más correcta, eso sí, siempre adaptándola a las necesidades y características de cada persona.
Sin embargo, ya sabemos que cualquier cosa en exceso puede ser perjudicial para la salud y, aunque podemos comer mucha fruta y verdura sin problema, existen algunas de ellas que pueden producirnos un trastorno clínico que, aunque no es grave, puede darnos algún susto si nos ocurre. Este es la carotenemia.
¿Qué es la carotenemia y qué alimentos pueden producirla?
La carotenemia es un trastorno clínico que se produce por un incremento de niveles de betacarotenos en sangre.
Los betacarotenos son pigmentos vegetales que están dentro del grupo de los carotenoides, que son los que dan ese color anaranjado, amarillo, rojo o incluso verde a muchos de los alimentos de estos tonos.
Sumado a ello, los betacarotenos son una fuente fundamental de vitamina A y se transforman en esa vitamina solo cuando el cuerpo lo requiere. También cuentan con efectos antioxidantes que nos protegen de varias enfermedades al reforzar el sistema inmunológico, estimulando la producción de glóbulos blancos en sangre.
La carotenemia también se puede conocer como carotinemia, hipercarotinemia o betacarotinemia y no afecta de manera dañina a nuestro organismo más allá de dar una hiperpigmentación cutánea amarillenta o anaranjada, que sobre todo se puede notar en las palmas de las manos y de los pies, en las rodillas, los codos y los pliegues cercanos a la nariz y la boca. También se debe tener en cuenta que esa hiperpigmentación se potencia con luz artificial y que afecta más a los niños y personas jóvenes.
La carotenemia es un trastorno que pone la piel de color amarillento o anaranjado por un consumo escesivo de alimentos de este color, aunque es difícil que se dé y se puede deber a otras causas, como la hiperlipidemia, la diabetes mellitus, hipotiroidismo, anorexia nerviosa, enfermedades hepáticas o enfermedades renales, por lo que siempre se debe acudir al médico al notar hipermpigmentaciones de este tipo en el cuerpo.
Alimentos que pueden producir carotenemia
- Zanahorias
- Albaricoques
- Naranjas
- Mangos
- Calabaza
- Boniato
- Melocotón
- Ciruela
Diagnóstico y tratamiento
Esta afección beninga debe ser analizada para descartar otras enfermedades como puede ser la ictericia, que suele darse por tener demasiada bilirrubina en el cuerpo o se tienen problemas de hígado.
Así, para diferenciar la carotinemia de la ictericia indican que es fundamental fijarse en las conjuntivas: amarillas en la ictericia y blancas en la carotinemia, aunque se llevan a cabo también otras pruebas. Una vez confirmado que se trata de carotinemia, el tratamiento no precisa de administración de fármacos, pues tan solo se deberá disminuir la ingesta de alimentos ricos en betacarotenos. Esto hará que la hiperpigmentación amarillo-anaranjada comience a irse gradualmente en uno o dos meses, contando con seguir tomando la ingesta recomendada de dichos alimentos.