5 errores que puedes estar cometiendo en el desayuno

Por lo general, tendemos a dedicarle menos tiempo y atención a una de las comidas más importantes del día: el desayuno.

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5 errores que puedes estar cometiendo en el desayuno
5 errores que puedes estar cometiendo en el desayuno

Vuelve la rutina y con ello las prisas por no llegar tarde al colegio de los niños, al trabajo... El gran perjudicado es el desayuno. Muchos somos los que caemos en 5 errores básicos que, con un poquito de atención, podríamos evitar y hacer que nuestro día sea 100% productivo… tanto en nuestra actividad cotidiana como en los entrenamientos.

1. Te tomas el desayuno para llevar. Debido a la falta de tiempo tendemos a coger algo rápido en la panadería cerca de casa y comerlo por el camino. Si le das importancia al desayuno, te molestarías en darle al cuerpo lo que realmente necesita y no lo primero que pilles. No masticar los alimentos de forma adecuada por las prisas puede llevar a problemas digestivos y comer andando distrae a nuestro cerebro de tal forma que consume más calorías sin darse cuenta.

2. Olvidas la fibra. Si tu desayuno está lleno de azúcares, tendrás hambre rápidamente porque los picos de azúcar en sangre bajan al rato de comer. Los alimentos altos en fibra (como la avena, los productos integrales, las legumbres o las verduras) son exactamente lo contrario: te sientes lleno durante más horas porque la fibra se queda en el estómago durante más tiempo y te lleva más digerirla. Deberías consumir unos 30 gramos de alimentos altos en fibra al día.

3. No estás tomando suficiente proteína. La proteína juega un papel importante en la sensación de saciedad. Una ingesta adecuada de proteína te puede ayudar contra los antojos. ¿Cuáles son buenas fuentes de proteína? Una tortilla con pan integral, avena con yogur griego y fruta o tostadas integrales con mantequilla de frutos secos, plátano y chía.

4. ¿Y la grasa?. Los alimentos altos en grasa deberían ser una parte integral de tu dieta, igual que los carbohidratos y las proteínas. Deberías incluir las grasas saludables como mantequillas de frutos secos, semillas, aguacates o yogur son buenas opciones.

5. No estás comiendo lo suficiente. No temas comer mucho al desayunar: para activar el metabolismo por la mañana es una buena idea que te llenes de alimentos naturales. De esta forma estarás preparado para afrontar el día y no tendrás que preocuparte porque te suenen las tripas horas antes de comer.

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