Este un tema en el que el Consejo Superior de Deportes debería entrar para ver realmente lo que ha ocurrido desde todos los puntos de vista. Para empezar, por las graves acusaciones que se virtieron en el programa "¿Y te lo vas a comer? que lidera el conocido cocinero Alberto Chicote y en segundo lugar por las consecuencias que al parecer podría haber tenido en modo venganza para alguno de los que se atrevieron a alzar la voz sobre la pésima calidad de la comida del Centro de Alto Rendimiento de Sevilla dónde habitualmente residen nuestros equipos internacionales de remo y piragüismo, entre otros.
Chicote recogió las quejas del equipo español de remo, que denunciaba que en el CAR andaluz se incumplía la normativa y se hacía negocio acogiendo a personas no deportistas, mientras que comida era de pésima calidad, muy lejos de cumplir las necesidades nutricionales que requiere el deporte del más alto nivel, lo que había tenido consecuencias importantes durante los entrenamientos. Los deportistas dijeron el programa de La Sexta que “no es raro que en el entrenamiento haya problemas de hipoglucemia, a alguno le dé la pájara y tenga que parar porque se queda vacío de azúcares y energía".
Y parece que aparecer en el programa de televisión les va a salir caro a los que se atrevieron a hacer la denuncia. Rubén Padilla, que fue uno de los que dio la cara con Chicote, ha denunciado “irregularidades y falta de criterio" por parte de la Federación Española de Remo en la elección de los participantes. No ha sido seleccionado para el Campeonato del Mundo que se disputará en Linz-Ottensheim (Austria) lo que le supone además quedarse sin ir a los Juegos Olímpicos de Tokio del año que viene, porque será en el Mundial dónde se consigan las plazas para estar en Japón en 2020.
El remero alicantino, de 28 años y que compite en la modalidad de doble skull, dice que le han dejado fuera de la listadel Mundial de forma “arbitraria" por la decisión de un directivo de la federación y “sin tener en cuenta el criterio de los técnicos". “Es como si un seleccionador de fútbol convoca a un jugador para el Mundial y llega un directivo de la federación y lo veta. Es verdad que no estamos al nivel de otros compañeros que luchan por las medallas, pero tenemos opciones de clasificarnos para los Juegos, a los que no solo tienen derecho a ir los que ganan. No nos dejan la posibilidad ni de poder intentarlo cuando llevan años invirtiendo en nosotros".
