Muchas de nuestras salidas, sobre todo en esta época del año, transucurren por caminos, parques o entornos naturales que poco tienen que ver con el trail técnico.
Para esos días en los que alternamos tierra yasfalto, no necesitamos calzado específico de trail running, lo ideal es contar con una zapatilla más adaptable, que equilibre amortiguación, tracción y resistencia.
Salomon lo ha entendido perfectamente y ha creado dos modelos de running versátiles, pensados para moverse con soltura tanto en senderos de gravilla como en caminos pavimentados: las Aero Glide 3 Grvl y las Aero Blaze 3 Grvl. Su suela se adapta a una amplia variedad de terrenos, ofreciendo confianza y fluidez paso a paso.
La Salomon Aero Blaze 3 Grvl está diseñada para quienes disfrutan corriendo fuera del asfalto, pero no quieren renunciar a un calzado rápido y reactivo en carretera. Su media suela energyFOAM Evo, con componentes de TPU, aporta una pisada ligera y elástica, con un retorno de energía que te ayuda a mantener el ritmo. El perfil Reverse Camber, esa curvatura de la suela que se aprecia a primera vista, favorece una transición suave del talón a la punta, lo que se traduce en una zancada más eficiente y natural.
La parte superior SensiFIT está confeccionada en una malla 3D sin costuras que se ajusta al pie como un guante, eliminando puntos de presión y garantizando comodidad incluso en tiradas largas.
Además, la versión con membrana Gore-Tex protege frente a la lluvia y el frío, perfecta para los meses de otoño e invierno

La suela Contagrip, optimizada para terrenos tipo gravel, ofrece una tracción excelente en grava suelta, tierra y caminos irregulares, sin perder fluidez en tramos de asfalto.
El resultado es una zapatilla equilibrada, cómoda y resistente, ideal para quienes buscan un modelo “todoterreno” capaz de rendir en cualquier superficie o condición meteorológica

ASÍ FUNCIONAN
Hemos probado las Salomon Aero Blaze 3 Grvl en la Casa de Campo de Madrid, un clásico para los corredores urbanos. Allí, entre pistas de tierra suelta y senderos más compactos, la zapatilla se muestra estable gracias a su base ancha, sin ningún balanceo ni inestabilidad.
La amortiguación responde de sobra incluso en distancias medias. En nuestras salidas de hasta 12 km la sensación de confort y protección ha sido notable: se mueve con facilidad, resulta rápida y transmite seguridad. El talón se percibe firme y el hueco central de la media suela añade un toque de rebote muy agradable.

Su suela es, sin duda, uno de sus grandes aciertos: ofrece más durabilidad que la de una zapatilla puramente de asfalto y mejora el agarre en terrenos sueltos y en curvas, evitando deslizamientos y aprovechando mejor cada zancada. Una aliada perfecta si eres de los que disfrutan explorando fuera de la ciudad, sin tener que renunciar al rendimiento de una zapatilla de running de asfalto.
PESO: 248 g (H), 204 g (M)
DROP: 8 mm
TACOS: 3,5 mm
Precio: 140 €



