He dejado para el fin de esta trilogía Adidas, recordad que ya he analizado la Solar Boost y la Adizero Rc, la seguramente más esperada y popular, la Solar Glide. Lo es porque a pesar de que Adidas no la está publicitando mucho, tampoco le hace falta, es la sucesora de una de las zapatillas más vendidas y con mejor feedback de la última década: La Supernova Glide Boost. Por si al hecho de analizar una zapatilla de las de culto no fuera poco la Solar Glide viene a sustituir a una última Snova Glide que ensombreció la saga. No era mala zapatilla pero nos dejó un sabor de boca extraño. La última Snova Glide fue demasiado blanda, sin carácter y con un ajuste bastante mejorable. Eran tal la sombra de la Snova Glide 8 que todos esperaban una renovación que mirara atrás y que devolviera el brío y el cortejo fácil con el atleta. ¿Será la Solar Glide lo que esperábamos?
¿VUELVE?
Como sé que hay flojeras que van buscando el titular lo diré claro: La Solar Glide es la digna sucesora de la Snova Glide 8. Adidas ha sabido devolverle la alegría a su modelo más polivalente trabajando la media suela y el upper. Veámoslo al detalle:
Upper: Por suerte no tiene nada que ver con el de su antecesora porque éste es muy ceñido al pie y con un perfil muy bajo. A nivel estético le hace ganar mucha agresividad a la zapatilla. Para nada agobia porque la horma sobre la que asienta es generosa, sin excesos pero tampoco con estrecheces. Esta configuración y el propio tejido hace que prescinda de todo refuerzo salvo dos placas termoplásticas en la zona media. Me ha gustado mucho la malla de ingeniería que han utilizado porque explota una solución fácil con un resultado excelente. Se compone de dos mallas, la interna que es bastante fuerte y la externa que va a tiras en el empeine. La separación de estas tiras determina las zonas de flexión. Para aquellos que tienden a enseñarles sus uñas al mundo Adidas ha colocado el debido refuerzo. Viéndolo quizás pueda parece que transpire poco pero si a 40º que he rodado hoy no he tenido problemas no creo que los de. En la zona del talón el contrafuerte del talón va dividido en dos piezas laterales dejando el tramo central libre. Ello libera al tendón de aquiles y consigue un ajuste más fácil.
Media suela: Suelen decir los cocineros que con buenos ingredientes salen buenos platos. Vale, sí, pero si el que cocina sabe lo que hace mucho mejor. La Solar Glide lleva lo mismo que las anteriores Glide, es decir EVA y Boost, pero infinitamente mejor distribuido. La Eva gana protagonismo en el medio pie haciendo una pequeña cuña a ambos lados que asegura la estabilidad. En la zona delantera solo va en una pequeña capa y en el talón es inexistente. Con ello Adidas trata de convencer a todos ya que la Solar Glide resulta blanda de talón, estable de medio pie y reactiva en el antepie. Llama la atención como el Boost sobresale en la zona delantera lo que le da una gran estabilidad también a esa zona. A buen seguro que como yo vais a picar en la trampa visual de Adidas y vais a ver esta Solar Glide más bajita de perfil que la anterior. Pues sorprenderos porque tiene un perfil de 27-17 (drop de 10) con lo que es más alta que la anterior Snova Glide. Ello habla bien a las claras de su gran amortiguación que ahora además está acompañada de una excelente estabilidad.
Suela: Adidas repite la misma suela en casi todos sus modelos y es que poco se le puede pedir a una suela con una durabilidad infinita, que agarra y toca bien el suelo.
EN MARCHA
Había ganas de ver cuánto se parecía esta Solar Boost a aquellas Glide 8 que nos dejaron embelesados. El listón estaba colocado en una estabilidad buena, una amortiguación de tacto medio y una respuesta brutal. Ahora de entrada y nada más ponerla vemos que la cantidad de amortiguación es algo más blanda y bastante más abundante. No cae en los excesos de la anterior edición y eso es algo que le suma dinamismo. La estabilidad junto al confort son los puntos donde esta Solar Glide ya marca diferencias muy a su favor. Comenzamos la marcha y en efecto la sensación de estabilidad, confort y amortiguación están a un nivel muy alto. La horma contribuye al buen aplomo de la zapatilla porque es algo más plana de lo habitual. Este es un hecho que nos genera dudas sobre cómo será la respuesta cuando le pidamos gas. Lo hacemos un responde bien a ritmos medios-altos y hasta todo lo que se pueda llegar a considerar un rodaje. Solo cuando ya no podemos llamarlo así vemos que perdemos palanca y que el tacto blando y sobre todo la horma nos penalizan pero para eso ya están las Boston.
En resumen diría que Adidas ha fabricado una zapatilla realmente muy competitiva y con grandes prestaciones que devuelve a la saga Glide adonde le corresponde. Quizás ya no sean aquellas Glide con un empuje brutal de antaño pero han ganado tanto en amortiguación, tacto y estabilidad que compensa de sobra.
OK: -Upper magistral. -Mejoran en dinamismo. -Confort, durabilidad, amortiguación y estabilidad brillantes.
K.O: -No consiguen igualar la pegada de las ya extintas Supernova Glide 8.