Probamos a fondo las Oakley Rader Pace

Desvelamos los puntos fuertes y los que se deberían mejorar en las gafas que incorporan un entrenador personal

Juanma Montero

Probamos a fondo las Oakley Rader Pace
Probamos a fondo las Oakley Rader Pace

“Tu ritmo de zancada es de 85, tienes que aumentar para que sea al menos de 88. Mientras corres, repítete mentalmente: pasos más cortos y rápidos, pasos más cortos y rápidos”. Este es uno de los mensajes que nos lanzaron las gafas Radar Pace durante uno de nuestros rodajes de running, para que mejoráramos nuestra técnica, pero más me sorprendió su respuesta el primer día que, de broma, le di las gracias por recordarme que me tenía que hidratar (otra sorpresa), después de una hora de pedaleo: “¡no hay de qué!” me respondieron las Oakley.

La tecnología de Intel con un diminuto chip integrado en las patillas hace posible estas conversaciones que parecen inteligentes, interpretando nuestras palabras. Basta con decir “OK Radar” para abrirle los oídos a las gafas y que estén atentas a tus mensajes. Las gafas están conectadas a tu smartphone, imprescindible en la ecuación, por la conectividad a internet que suministra y esta gran diferencia que supone su gran ventaja sobre el resto es a su vez el inconveniente principal: en cuanto nos alejamos de zonas civilizadas y la cobertura baja, las respuestas de las Oakley a nuestras preguntas se hacen más lentas e incluso llega un punto en que no existen.

La app Oakley Radar Pace se ocupa de registrar tus sesiones y también te puede diseñar un plan de carrera o de bici con los diferentes objetivos que tú le des, guiándote en su consecución. Te va avisando de lo que te queda para cumplir cada sesión e incluso permite sustituir unas sesiones por otras y vuelve a adaptar el plan. ¡Muy potente! Notifica tu rendimiento de forma regular y cuando haya algo que destacar, lo hará: “Muy bien, has subido 20 metros en 2 minutos, con un ritmo de zancada medio de 85 y una potencia media de 170.” Siempre que quieras le puedes pedir datos (pulsaciones, ritmo, desnivel ascendido, distancia, etc.) Además del control por voz la patilla izquierda tiene una amplia superficie táctil que responde tanto a toques como a deslizamientos, para responder llamadas de teléfono, conectar música, avanzar canciones, controlar el volumen, etc.

Puedes vincularla con infinidad de sensores de diferentes marcas tanto Bluetooth Smart como ANT : de pulsaciones, de velocidad en bicicleta, de cadencia, de potencia, etc. para enriquecer la información y hacer más preciso tu entrenamiento. En bicicleta, nos recomendaba usar sensor de potencia para afinar lo más posible el entrenamiento cuando nos diseñó un plan y empezamos a ejecutarlo. Al final “se conformó” con rastrear nuestras pulsaciones como dato de nuestro rendimiento y ponernos cuestas y diferentes distancias como deberes. Su programa registra las cuestas, sabe si las estás haciendo al 'percibir' el incremento de altitud, te informa y te anima, está genial.

Nos gustó ver que las sesiones se pueden exportar en formatos csv, fit, gpx o tcx, para poderlas guardar en otras plataformas.

En bici nos preocupa el hecho de que en carreteras abiertas al tráfico no se pueden usar auriculares, en nuestras pruebas probamos desmontándole uno (se conectan por micro USB a las gafas, son independientes) y no tuvimos problema para escuchar el tráfico y a la vez a nuestras Oakley, pero no tenemos muy claro que eso sea legal. En el peor de los casos puedes poner el móvil en un soporte de manillar y leer la información en la pantalla. En la bici también te ocurrirá que a partir de cierta velocidad el ruido del viento dificulte la audición de los mensajes de las gafas, pero todo está pensado e incluyen un deflector desmontable que al instalarlo minimiza muchísimo el ruido. Corriendo a pie no hay problema. 

Otro hecho que nos preocupó es cuando perdía la conexión con el smartphone y dejaba de darnos información o ésta se retrasaba mucho, en zonas con poca cobertura. Nos aseguraron que en próximas actualizaciones mejorarán este punto, nosotros hemos probado la versión primera.

OK:

-Muy motivadoras, con mensajes sorprendentes.

-Gafas, música, manos libres y entrenador en un solo dispositivo.

-Tecnología única, muy desarrollada.

-Con lentes Prizm, mejoran mucho la agudeza visual y la percepción de contrastes.

KO:

-Si no hay buena cobertura móvil de datos la interacción empeora.

-Perdidas de conexión con el móvil.

-No es legal en España ir en bici con auriculares.

Precio aprox. 439 € con lentes Prizm de sol y lentes transparentes incluidas.

http://es.oakley.com/ES/