DOS PARTES
Si la Mizuno Wave Inspire fuera un coche tendría un grave problema con el reparto de pesos. La Inspire tiene un talón muy sólido, propio de una zapatilla de mayor empaque, y una zona delantera algo más liviana que la mayoría de sus competidoras. Resulta así pues una zapatilla muy interesante para quienes reclutan toda su pronación en el talón. A los que pronan tardíamente o de medio pie incluso seguramente se les quede corta la corrección. Ésta corresponde a la placa Wave que aparte es elemento amortiguador. Recibe el nuevo cuño Cloud Wave que en teoría incrementa la reactividad y es doble por la cara interna para corregir. Como digo es una corrección altamente efectiva pero limitada porque solo lo hace en el talón.
El compuesto principal de la media suela es el U4IC de color blanco que se ayuda de un material algo más blando, el U4ICX, en el talón. Aun así seguiremos percibiendo el talón más firme por la presencia de la placa Wave. La suela también es muy típica de Mizuno, con compuestos más bien duros que aseguran muchos kilómetros. Lo sorprendente, como siempre dicho de paso, es que a pesar de esa dureza agarran bastante bien y logran buena tracción. Esto último sorprende porque siempre han sido suelas con una configuración de asfalto que se han defendido mejor en tierra que en el propio asfalto.
El upper merece un capítulo aparte. Dentro de la continuidad general que nos ofrece la zapatilla el upper es la parte más novedosa. Muy pocas pegas se le pueden poner, es suave, elaborado, muy bien ejecutado y cumple incluso teniendo como compañera una horma ciertamente ancha. Si bien es verdad que el talón es prácticamente inexpugnable la parte delantera tampoco se queda corta. A pesar de no ver refuerzos en esa zona el pie no titubea en absoluto gracias al trabajo invisible de unas pequeñas tiras internas que sujetan con gran éxito.
EN MARCHA
Esa dualidad se nota en marcha. La Inspire es una zapatilla que cuesta mover si implicas mucho al talón. Debido a su drop de 12 mm evitarlo no es nada fácil así que queda claro que es una zapatilla para rodar lento. Sus 310 gramos sin ser demasiados tampoco la ponen en cabeza en cuanto a ligereza en su segmento. La parte buena es que tenemos una zapatilla que no va a ceder ni ante la pronación más férrea y que nos va a durar muchos kilómetros.
Destaco de nuevo la labor del upper, en marcha también resulta espectacular y culpable de la gran estabilidad de la zapatilla. Aun con una suavidad excelente y con un ajuste tan rápido como intuitivo el pie queda fuertemente sujeto. Ni apurando los ritmos por circuitos curvados dejas de tener la sensación de correr sobre raíles.
En resumen recomendaría la Wave Inspire a corredores de pisada pronadora, sobre todo si es de retropié, con peso de 70 a 85 kilos, que busquen una zapatilla para ritmos superiores a 4:15 min/km y muy duradera.
Peso: 310 gramos
Precio aprox. 145 €
OK:
1/ Control de retropié muy efectivo
2/ Ejecución magistral del upper
3/ Durabilidad general
KO
1/ Respuesta muy limitada
2/ Flexbilidad y tacto mejorables
3/ Esperábamos un cambio más profundo.
Por Fernando Chacón, gerente de Emotion Running www.emotionrunning.com