Desde sus orígenes Hoka One One parece tener claro que tiene que presentar argumentos diferentes para entrar en un mercado plagado de competencia. Arriesgaron mucho creando un concepto, el maximalismo, que ahora más de una marca trata de imitar con más o menos fortuna. Cosas del destino, por si se podía pedir más, Nike lanzó su modelo Vapor Fly con algunos esquemas maximalistas y de repente esos perfiles tan altos dejaron de ser algo minoritario. Ciertamente Hoka One One parece haber tenido suerte pero hasta ahora todo lo que estamos probando también habla de muy buen trabajo.
La Evo Carbon Rocket es una zapatilla, al igual que la Carbon X, inteligente e interesante. Ya sabéis que no me suelo cortar y en este caso tampoco lo haré. A día de hoy ninguna marca dispone de un compuesto como el Zoom X de Nike (pronto ya veremos) y el margen que les queda es jugar con compuestos parecidos y sacarle el máximo partido a la placa de carbono. Todo eso parecen haberlo entendido a la perfección en Hoka pues de nuevo encontramos una zapatilla diferente y muy trabajada. Si esperabais la competencia directa de las Vapor Fly no es ésta, pero si queréis una zapatilla muy buena, sí lo es.
OPORTUNISTA
Sin perder la vista de aquella prueba que realicé de la Carbon X, recordad que os dije que me daba la impresión de que había sido hecha sobre la base de la Zoom Fly de Nike, corrigiendo todos sus errores. La Carbon Rocket diría que hace lo mismo, pero con todo el mercado. Es una zapatilla que se mete de lleno en un nicho que parecía un tanto aburrido, el de las zapatillas rápidas pero con cierta amortiguación para carreras largas. Sin duda saben que muchos están mirando a otro lado y han decidido darle ruido a zapatillas que, aunque consagradas, como la Adidas Adizero Adios o la New Balance 1400 RC, van perdiendo fuelle a la espera de una renovación. La Carbon Rocket trae aire fresco, metiendo por primera vez en este sector la placa de carbono y no deja de mirar al nicho de los triatletas donde tiene muchos seguidores. Desde luego que han sabido colocar una buena carta en el mejor sitio.
OTRO ENFOQUE
Parece que ponerle una placa de carbono a una zapatilla es dotarla de un tremendo rebote. Es así pero no olvidemos que hay muchas más cosas que puede hacer la placa. En Hoka One One de nuevo le vuelven a dar un punto extra de estabilidad a la zapatilla y la pone a un nivel muy alto. Además de generar rebote la utilizan para darle un tacto un tanto particular que me sigue gustando mucho. Desde luego que la devolución de energía se nota, pero la Carbon Rocket lo hace una manera peculiar, como veremos luego. Ahora toca saber un poco más de cómo está hecha:
SUELA: Está realizada por un compuesto llamado Rubberized Foam que se mueve a caballo entre la típica goma de suela y un compuesto de mediasuela. Está pensada para dar un tacto suave y mucha tracción si bien su durabilidad es menor. Para evitar desgastes prematuros en las zonas más comprometidas se colocan pequeñas placas de Rubber duro. Las prestaciones y durabilidad son muy buenas. Destaca que no hay estrías de flexión y es que sencillamente no hacen falta.
MEDIASUELA: Las estrías de flexión no hacen falta porque a unos milímetros, insertada en la mediasuela, tenemos una placa de fibra de carbono. Lógicamente con ella allí olvidémonos de la flexibilidad porque su labor consiste precisamente en evitar la flexión y crear un efecto palanca. Justo por encima de la placa una generosa capa de Profly con dos densidades. En el antepié más blando y suave y en el talón más firme y consistente. Tiene unas medidas de 28-27 mm, o sea, un drop de un solo milímetro.
UPPER: Muy generoso y espacioso. Dos finas capas lo conforman, siendo muy transpirable y fresco. Se ajusta bien a pesar de carecer de refuerzos y estar montado sobre una horma bastante ancha para una zapatilla rápida. Sin duda los corredores de pies anchos, que habitualmente tienen difícil encontrar zapatillas de competición acordes, tienen un filón.
EN MARCHA
A pesar de ser una zapatilla de competición y llevar una placa de carbono la primera sensación es de zapatilla mullida y con mucha amortiguación. Ya de entrada te das cuenta de que la Carbon Rocket te puede dar el apaño para carreras muy largas y que no le debe hacer ascos ni a un maratón. La placa de carbono se nota porque la zapatilla no se dobla y tiene un punto de estabilidad y sensación de terreno particular. Ocurre que, sin embargo, al no tener la horma tan curvada como la Carbon X es menos invasiva. En la Carbon Rocket hay mundo más allá de los ritmos de infarto. Desde luego es algo muy bueno si las quieres para carreras largas porque más tarde o más temprano todos hemos hecho kilómetros que, mejor olvidar. Ya sabemos que la Carbon Rocket es bastante buena si de ir lento se trata, de lo mejor que puedes encontrar en zapatillas de competición, pero lógicamente queremos saber cómo va cuando se le aprieta.
Conforme uno va afinando los apoyos y pegándole con más contundencia al suelo el trabajo de la placa de carbono comienza a relucir. Rebota, sí, pero sobre todo notas que vas sobre raíles. La guía de pisada es excelente y se gana bastante en eficiencia. La placa no va inclinada en exceso y es por eso que no es tan invasiva. Si apretamos nos movemos bien a ritmos de carrera de 5-10 km, si bien a ritmos ya muy altos se ve lastrada por su perfil y peso.
En resumen diría que la Hoka One One Rocket Evo es una excelente zapatilla de competición para carreras desde 10K hasta maratón, que ofrece muchas posibilidades. Ofrece mucho confort, una horma ancha y cierta pegada para garantizar carreras de largo aliento por asfalto con gran protección y con argumentos distintos a la competencia. También es muy fiable para triatletas de larga distancia pues aparte de lo mencionada se pone muy rápido.
Peso: 217 gramos
159.95 €
OK:
- Muy estables y amortiguadas.
- Bien posicionadas estratégicamente.
- Ofrece argumentos como la horma ancha difíciles de ver en sus competidoras.
K.O:
- Algunos gramos de menos le vendrían bien.
- A velocidades muy altas le falta respuesta.
- Los atletas de pies finos quizás las encuentren un poco anchas.