1. Tratamiento farmacológico:
a. Analgésicos.
b. Antiinflamatorios
c. Relajantes musculares
d. Corticoides
e. Medicamentos biorreguladores
f. Homeopatía
g. Acupuntura
h. Otros: Anestésicos locales, ácido hialurónico, colágeno
2. Tratamiento fisioterapeútico
3. Tratamiento quirúrgico
4. Terapias no convencionales: homeopatía, acupuntura, medicina biorreguladora...
Estos medicamentos presentan dos beneficios importantes, por un lado, sería la eficacia siendo igual o mejor que los analgésicos y con la ventaja de no tener efectos secundarios.
- Se pueden administrar por vía oral, que es lo más habitual
- vía tópica (las cremas)
- vía parenteral (intravenoso con un suero, intramuscular)
- por infiltración local (en la zona de la lesión).
¿QUÉ SON LAS INFILTRACIONES?
La opción que os contamos es la infiltración, que consiste la introducción del medicamento en la zona de lesión (articulación, tendón, músculo,...), mediante una aguja. Pero además, los medicamentos utilizados pueden pincharse en puntos distales como pueden ser puntos gatillos, y puntos de acupuntura (homeopsiniatría)
Los medicamentos que suelen usarse son corticoides junto con anestésico local en la misma jeringa. Pero desde hace unos años debido a las publicaciones que disponemos en la actualidad, utilizamos medicamentos biorreguladores. Estos pueden usarse además con una técnica que es mesoterapia (inyección intradérmica a menos de 4 mm de profundidad de la piel).
Las indicaciones de las infiltraciones están bien definidas aquí