Hacerse con un maillot idéntico a los que lucen los corredores del World Tour supone un importante desembolso, eso está claro, pero la pregunta es si merece la pena el gasto para vestir como los ídolos del pelotón. En primer lugar, tened claro que las réplicas de las prendas oficiales no suponen únicamente portar los mismos colores, sino enfundarse tejidos que aúnan todos los adelantos posibles para el máximo rendimiento del ciclista. Cuando te pruebas uno de esos maillots sientes al instante la diferencia con otros que nos echamos encima los simples mortales. Por poner un ejemplo, el uniforme de nuestra escuadra nacional en la ronda gala, el Movistar Team, está confeccionado por Gobik y puedes encontrarlo en la web de la marca por un atractivo precio de 105 euros. El maillot que lucirán Enric Más y el resto del equipo tiene 110 gramos de tejido texturizado y una confección bonding, sin costuras, con los paneles pegados, para dar la mejor aerodinámica y dispersar el aire.
Por todo esto, lo primero que habrás de valorar antes de lanzarte a por uno es si realmente le vas a sacar partido. Son prendas top para exprimirlas al máximo. Y tampoco pienses que son eternas. Como todo producto de avanzada tecnología, sus propiedades se irán reduciendo con el tiempo. Si lo lavas con agua fría y no usas suavizante por seguro que su buena salud aguantará los cien lavados. Cuando empiece a perder la forma inicial será momento de desecharlo para las etapas largas.
Ahora que ya sabes lo que supone la última tecnología en vestuario ciclista, solo te queda decidirte por el equipo al que apoyarás en tus salidas semanales.