En las anteriores entregas de esta serie de deportes, parte I y parte II, no presentes en Paris 2024 explicábamos las condiciones que el COI exige a las distintas disciplinas para formar parte de la familia olímpica. Así, como primera premisa, que se practique en un mínimo de 75 países y 4 continentes por hombres y un mínimo de 40 países y 3 continentes por mujeres. A continuación, que disponga de federaciones y se someta a los preceptivos controles antidopaje. Así, leídos los requisitos, que levante la mano quien piense que el fútbol sala no los cumple. Ningún brazo alzado, ¿verdad? Y es que nadie acertará a entender cómo un deporte que se practica en polideportivos y colegios de todo el mundo aún se encuentra luchando por su inclusión en los Juegos Olímpicos. La modalidad futbolística de portería y pelota pequeña que enfrenta a cinco jugadores contra cinco se juega en parques, patios y calles de los cinco continentes. Incluso a veces con las mochilas o los árboles sirviendo de postes. ¿No es ese el verdadero espíritu olímpico?
En el mundial celebrado en Lituania en el año 2020 se repartieron plazas para los cinco continentes (AFC 5 plazas; CAF 3 plazas; Concacaf 4 plazas; Conmebol 4 plazas; OFC 1 plaza y UEFA 7 plazas. Y eso no es todo, para poder concurrir a la copa del mundo se enfrentaron en las rondas previas aquellos países que mantienen una competición nacional organizada de futbol sala. ¿Queréis saber cuántos fueron? Nada más y nada menos que 112 países con federaciones reconocidas en este deporte. ¿No conoce este dato el COI? Por supuesto que sí, pero algo está impidiendo reaccionar ante lo que es un clamor internacional. La Carta Olímpica exige también que un deporte que quiera estar presente en los Juegos sea aceptado por el máximo organismo olímpico siete años antes. ¿Quiere eso decir que tampoco estará el futbol sala presente en la edición de 2028? ¿Cómo pueden desfilar bajo la antorcha modalidades como el baloncesto 3x3 y no hacerlo en futbol sala?
Países como España, Portugal, Francia, Rusia, Estados Unidos, Argentina, Brasil, Egipto, Uzbekistán, Irán o Nueva Zelanda esperan impacientes poder competir por las medallas en la gran cita del deporte.
Todos los que practicamos este deporte universal debemos apoyar para que el sueño olímpico se cumpla cuanto antes. Si los motivos son económicos, que queden a un lado, se trata de respetar al olimpismo, a los deportistas y a los aficionados.