1 Rodilla del corredor
Se puede evitar con un buen desarrollo muscular, con pesas, o en su defecto con gomas, con poco peso y muchas repeticiones. Con dos veces a la semana media hora “blindas" tus rodillas. Echa un ojo a estos consejos básicos para potenciar tus rodillas.
2 Osteítis de pubis
Tiene una recuperación muy lenta, se produce cuando la pelvis rota y cambia en un movimiento oscilante de carrera, la articulación se separa ligeramente y el cartílago se inflama y se endurece. Esa rotación se debe a una descompensación de fuerzas entre los aductores y abductores. Los corredores con zancada muy amplia son propensos a sufrirla. Para prevenir, haz al menos 100 abdominales diarios, ejercicios específicos con pesas o gomas y estiramientos después de entrenar.
Te mostramos los ejercicios más eficaces para tratar esta lesión.
3 Lumbalgias
En algunos casos pueden ser bastantes graves,como las protusiones discales, se pueden reducir en gran medida realizando los abdominales adecuados.
La guía con los mejores ejercicios para tratar y prevenir la lumbalgia.
4 Periostitis y las tendinitis aquilea
Como en las anteriores, se pueden evitar en gran parte realizando ejercicios de potenciación en el pie y el tobillo. Las tendinitis también se pueden evitar con estiramientos de sóleos y gemelos. Las periostitis se evitan fortaleciendo mucho los peroneos y los tibiales (una también zapatillas con buena amortiguación y no cambies demasiado recuentemente de marca y modelo).
Aprende a tratar la periostitis con una rutina elemental.
5 Fascitis plantar
Se puede evitar potenciando el pie y estirando la planta del mismo. Es un grave error negar el dolor. Hay que parar con los primeros síntomas. Corre descalzo. Correr sin zapatillas sobre hierba una vez a la semana 500-1.000 metros ayudará a mejorar la flexiblidad de tus tobillos y a fortalecer tus pies.
Descubre cuál es el tratamiento completo para evitar y recuperar la fascitis plantar.