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Joseba Quintana Echeburua ha perdido 31 kilos, de 118 a 87 kg con 181 cm de altura, en casi 2 años, y ha mantenido su peso ya 2 años. Y durante el confinamiento siguió adelgazando con su reto de subir los 14 ochomiles del mundo, sin salir de casa, ¡haciendo los 11 pisos de escaleras de su edificio!
“De pequeño ya tenía mi peso, nunca he sido delgado, pero cada año iba ganando un poco más y pasé de ser ‘gordito’ a ‘gordo’. Siempre he sido muy deportista, llegaba a todos los sitios con el ‘artículo 33’ (por mis “cojones”). Aunque me pesaban los kilos llegué a correr 5 maratones, 10 Behobia-San Sebastián, he subido al Aneto, el Montarto, Txindoki, he hecho marcha nocturna Itziar de San Sebastian a Itxiar, de más de 42 km.
Trabajo en hostelería pero soy una persona muy sana y deportista, no bebo alcohol ni hago excesos, pero mi vida era muy desordenada de horarios, y comidas a destiempo, con mucho estrés.
Me sorprendía que a pesar de hacer mucho deporte, no conseguía perder peso, iba cogiendo más kilos, y si adelgazaba, lo recuperaba enseguida.
Al ponerme a dieta hace 2 años, empecé a perder rápido, unos 5 kilos al mes. Luego fue más despacio, y en la pandemia me planteé el reto de subir escaleras, y así fui adelgazando más, perdiendo el peso en todo el cuerpo, especialmente en la zona de la barriga, y sin recuperarlo. Ahora vienen al restaurante y me preguntan que dónde está mi hermano Joseba, no me reconocen”.
¿Qué crees que te hace engordar a pesar de hacer tanto deporte?
Me gusta mucho comer, ir a los mercados, cocinar, y disfruto con los buenos platos, pero ese no era mi problema, era la mala alimentación, comía desordenado y fuera de horas, y picaba también entre comidas, mucho dulce, galletas y chocolate. Ahora como bien, en menor cantidad y sin picoteos. He ordenado los horarios de las comidas y ya no como entre horas.
Cuéntanos cómo comes un día normal ahora:
Por ejemplo:
- Desayuno a las 9 de la mañana en el trabajo, un descafeinado y alguna galleta. Antes no desayunaba pero luego a media mañana me comía media tortilla.
- Como pronto a las 13h, un plato de cuchara muy completo y con la cantidad que necesito para estar bien, sin pasarme.
- Meriendo generalmente después de entrenar, un poco de queso o de jamón con una tostada y un yogur y algo de fruta.
- Ceno a las 21h, intento cenar con la familia, un filete o pescado a la plancha con ensalada o verdura.
- Bebo bastante agua cada día y bebida isotónica sin azúcares.
¿Qué es lo que te motivó a adelgazar?
Estoy operado dos veces de cada rodilla, quería sentirme más ligero y hacer más deporte, y necesitaba perder peso. Ya tenía la tensión alta, y azúcar, aunque iba bien de colesterol, todo sumaba en contra, y quería tener más sensación de bienestar en general.
Has hecho dietas antes pero ¿qué tipo de dieta ha sido la que te ha hecho perder peso y mantenerlo esta vez?
Amaya, mi mujer, es médico y especialista en medicina estética, y me había recomendado dietas antes. Pero como recuperaba el peso cuando volvía a mi vida normal, esta vez me propuso cambiar de hábitos más que hacer dieta, poner orden y control en las comidas y en las cantidades, mientras seguía haciendo mucho deporte.
Eres una persona muy deportista pero ¿Qué tipo de ejercicio te ha ayudado esta vez a adelgazar sin recuperar el peso perdido?
Ya hacía mucho deporte en general, soy muy ‘machaca’, andar mucho, esquí, bici de montaña, escaleras, tengo una máquina de steps en casa y me gustan los deportes de raqueta, juego con el monitor Jorge Chavarri. También entreno con Conchi Tapia, ejercicios de core y estiramientos. Y además mi trabajo en el restaurante es muy movido, pero estoy todo el día de pie y las rodillas sufren mucho.
Lo que marcó el cambio y conseguir adelgazar más y no recuperar el peso, fue ‘mi reto de las escaleras’. Cuando estaba encerrado en casa durante el confinamiento se me ocurrió subir escaleras, vivo en un 6º y me hacía los 11 pisos de casa 10 veces. Al día siguiente de la primera vez no podía ni moverme. Así estuve los 4 meses del confinamiento. A mitad del confinamiento medí los escalones y vi que hacia 416 m diarios de desnivel, y pensé que si hace 12 veces cada día, en 24 días equivalía a un Everest. Así que estuve un año entero, durante 286 días seguidos, subiendo 134 pisos cada día y bajando en ascensor. Al principio tardaba una hora y cinco y ahora sólo 40-42 min, subo 12 veces los 11 pisos.
¿Cómo has conseguido mantenerte y no recuperar los kilos perdidos?
No me ha costado esta vez, una vez que he bajado de peso, como como mucho menos, un poco de todo, y si me apetece algo de chocolate de leche lo como, pero en menos cantidad y no todos los días.
Mi plato favorito son los huevos fritos con patatas, los cenaría todos los días, ahora los como de vez en cuando, y como más variado más verdura y pescado.
¿Qué crees que ha sido ‘clave’ para lograr perder peso de forma definitiva?
Las `ganas’ que puse en el intento, estaba muy motivado. Ahora me siento muy cómodo haciendo deporte, me canso menos, estoy mejor.
Cuando alguien te pide ayuda para perder peso ¿qué les dices?
Que se puede, que si quieres, ¡sí puedes!
¿Cuál es tu próximo reto deportivo, profesional o en tu vida?
Seguir estando bien, y para el año que viene estoy preparándome para correr los Sanfermines después de 2 años si ellos, ya que los he corrido durante 32 años. Y hago algo de carrera con poco tiempo y más intensidad, en plan sprint, para ir bien preparado.
La nutricionista
Dra. Amaya San Gil, es médico, máster en nutrición y en medicina estética, y además es la mujer de Joseba y ha sido la ‘nutricionista’ que le ha ayudado a adelgazar.
Cuéntanos, Amaya ¿Por qué no conseguía adelgazar aun haciendo mucho deporte?
Joseba era un desastre, en la mesa comía poco, pero luego comía mucho a escondidas, era comedor impulsivo. Le he puesto a dieta muchas veces. Curiosamente, le conocí como paciente y le puse su primera dieta en el año 1996, con una dieta controlada con sobres bajó 15 kilos, pero luego volvió a cogerlos. Ya como pareja, seguía dietas, adelgazaba y recuperaba. Y la última vez ya estaba muy fastidiado con el sobrepeso, tiene un problema de estómago, y le conviene comer menos cantidades y sin picoteos, y con los problemas de rodillas se lo tomó en serio. Esta vez ha conseguido adelgazar y mantenerlo al seguir una pauta fija, comiendo a horas regulares, sin picotear, y reduciendo cantidades, y lo que en la hostelería es difícil.
Ahora, le veo bastante mentalizado, se cuida bastante, come a sus horas, no picotea, y si nota que gana algo de peso se lo quita. Y con el Covid-19 los horarios del restaurante han cambiado, y ahora no tiene que acostarse a las 3 de la mañana, lo que también le ayuda a controlar los picoteos.
Lo que destaco de Joseba es que es muy ‘cabezota’, lo que quiere lo consigue, tiene mucha fuerza de voluntad. Y que es muy activo, el deporte es su vicio y se le da muy bien, se puede ir a entrenar aunque no haya dormido, lo disfruta y le ayuda a mantenerse en forma y eliminar el estrés.