Se debe respetar una recuperación suficiente para afrontar el siguiente esfuerzo, y cuya intensidad será directamente proporcional al tiempo que se debe recuperar. Habrá casos, como en el interval training, en los que la sensación no será de completa recuperación y la siguiente serie se inicia con sensación de no haber recuperado aún del todo, pero en este caso está prevista ya que lo que buscamos con ese tipo de entrenamiento es la mejora de la recuperación optimizando la capacidad de recuperación del corazón y pulmones.
¿Son peligrosas las series?
Fundamentalmente, hablando de personas que tienen hábito deportivo y se cuidan, encontraremos que el calentamiento recobra bastante importancia, ya que debemos preparar muy bien al organismo para realizar esfuerzos de intensidades superiores a lo que está habituado y reducir al máximo las posibilidades de lesión, y es que en el entrenamiento de series las contracciones musculares, tanto por fuerza como por amplitud de zancada, serán mucho mayores y nuestra musculatura podría tener problemas como micro roturas o típicos tirones.
Para ello no sobrará hacer 15-20 minutos de carrera continua suave, seguida de 5-10 minutos de estiramientos y concluyendo con 3 o 4 progresiones de 60-80 metros en las que terminamos de entrar en calor.
Para los que no conozcan las progresiones, son sprints de 60-80 metros en los que se empieza suave y en progresión se va aumentando la velocidad hasta terminar al 80-90% de tu velocidad. Se debe tener cuidado siempre con las frenadas para que no sean demasiado agresivas.
Hablando de personas con problemas coronarios o de corazón, o con diabetes, obesidad, etc... el riesgo de tener problemas en este tipo de entrenamientos es bastante alto, y lo que se recomienda es la práctica de deporte aeróbico controlado.