Un nuevo estudio arroja datos preocupantes sobre los riesgos del consumo habitual de carne roja y procesada. Al parecer, una cantidad diaria no tan alta como cabría esperar aumenta el riesgo de padecer diabetes tipo 2. La investigación que se acaba de publicar en The Lancet Diabetes and Endocrinology se basa en una evaluación de los hábitos alimenticios de casi dos millones de personas.
Nuestra investigación proporciona la evidencia más completa hasta la fecha de la asociación entre el consumo de carne procesada y carne roja sin procesar y un mayor riesgo futuro de diabetes tipo 2.
Esto es lo que señalan los autores del estudio, dirigidos por Nita Forouhi, de la Unidad de Epidemiología del Consejo de Investigación Médica (MRC) de la Universidad de Cambridge (Reino Unido).
Respalda las recomendaciones de limitar el consumo de carne procesada y carne roja sin procesar para reducir los casos de diabetes tipo 2 en la población.
Qué se considera carne roja y procesada
Carne procesada
- La carne procesada es aquella que ha sido transformada mediante salazón, curado, fermentación, ahumado, marinado, adobo u otros procesos destinados a mejorar el sabor y preservar el alimento.
- Se elabora casi siempre con carne de cerdo o de res, pero también hay productos elaborados con otras carnes rojas, aves o subproductos cárnicos como la sangre.
- El principal motivo por el que se aconseja evitar o, al menos, limitar el consumo de carne procesada es porque se ha relacionado con un incremento del riesgo de ciertos cánceres, especialmente el de colon. No obstante, como se ha visto en el nuevo estudio, también incrementa las probabilidades de padecer otro tipo de enfermedades, como la diabetes tipo 2.
Se consideran carnes procesadas numerosos tipos de alimentos:
- embutidos y fiambres: chorizo, longaniza, salami, chistorra, butifarra, fuet, chóped opatés
- salchichas
- hamburguesas
- sobrasada
- pincho moruno,
- tocino, panceta, beicon
- carne picada
- salsas elaboradas a base de carne
- caldos de carne, pastillas de caldo de carne
- carne en conserva: jamón, cecina carne seca
Carne roja
- La carne roja es la de vaca, ternera, cerdo, cordero, lechazo, caballo y cabra.
- Aporta proteínas de alto valor biológico y otros nutrientes, pero se aconseja un consumo moderado porque diversos estudios han apreciado que una ingesta frecuente y elevada se relaciona con un mayor riesgo de patologías como las cardiovasculares o ciertos tipos de cáncer.
Cantidad diaria que aumenta el riesgo de diabetes tipo 2
- El nuevo estudio muestra que el consumo a largo plazo de 50 gramos de carne procesada al día -equivalente a 2 lonchas de jamón- se asocia con un 15% más de riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 en los 10 años siguientes.
- El consumo de 100 gramos de carne roja no procesada al día -equivalente a un filete pequeño- se asoció con un 10% más de riesgo de diabetes tipo 2.
- El consumo de 100 gramos de aves de corral al día se asoció con un riesgo un 8% superior de diabetes, pero cuando se realizaron análisis adicionales para probar los hallazgos en diferentes escenarios esta asociación dejaba de ser significativa; en cambio, el vínculo entre la diabetes y las carnes rojas y procesadas se mantuvo.
Recomendaciones semanales de carne roja y procesada
En general, se recomienda una ingesta no superior a 1-2 raciones de carne roja a la semana, o incluso menos. En cuanto a la carne procesada, se aconseja evitarla o, como mucho, tomarla de forma ocasional.
La Comisión EAT-Lancet, considerada un referente internacional, aconseja como máximo una ración de carne roja a la semana y dos de blanca.
El Comité Científico de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan) considera que el consumo de carne debería limitarse a un máximo de tres raciones semanales. No especifica cuántas raciones de carne blanca y cuántas de roja, pero sí menciona la necesidad de priorizar las aves y el conejo (blancas).
Fuentes:
Chunxiao Li, Tom R P Bishop, Fumiaki Imamura, et al. (2024). Meat consumption and incident type 2 diabetes: an individual-participant federated meta-analysis of 1·97 million adults with 100 000 incident cases from 31 cohorts in 20 countries. The Lancet Diabetes & Endocrinology.