Leche fresca o leche UHT, ¿qué es más sano?

¿Qué tipo de leche tomas tú? Te contamos los beneficios de tomarla cruda, fresca o UHT

Domingo Sánchez

Leche fresca o leche UHT, ¿qué es más sano?
Leche fresca o leche UHT, ¿qué es más sano?

Vivir en las grandes ciudades y disponer de mayor tiempo de conservación, nos ha llevado a cambiar la tradicional leche cruda hervida a comercializarla bajo dos procesos industriales: la pasteurización (leche fresca) y la esterilización (leche UHT). Pero… ¿cuál es más saludable?

¿Se pierden nutrientes? La gran diferencia es que el proceso de la UHT esteriliza la leche y elimina toda la carga microbiana, mientras que la pasteurización no la elimina toda, sin embargo, esto último puede ser una ventaja.

(Si eres de bebida vegetal, no te pierdas nuestra comparativa entre la bebida de soja y la de almendras)

Leche fresca

En los supermercados la podemos encontrar en la sección de refrigerados. No debe romperse la cadena del frío (entre dos y seis grados).

Al no elevarse tanto la temperatura durante su tratamiento sobreviven bacterias que lejos de lo que podamos pensar son saludables para el tracto gastrointestinal.

Este tipo de leche contiene vitaminas del grupo B y A, muy buenas para nuestra salud. Además de tener más contenido en calcio que cualquier otro tipo.

Leche UHT

No necesita frío mientras está empaquetada en su característico envase de tetra brick.

Las altas temperaturas a las que es sometida provocan la caramelización parcial de los azúcares de la leche dando lugar a cambios en el color, el olor y el sabor. De ahí que las generaciones anteriores mantengan que "ya no sabe a leche".

Las vitaminas del complejo B y la vitamina C se pierden al tratarla a más de 100ºC

Comparativa del tratamiento de la leche para su consumo:

  Cruda Fresca UHT (normal)
Proceso Hervido Pasteurización Uperización
Temperatura 40 Cº 72-90 Cº 150 Cº
Tiempo Varios minutos 15 segundos 5 segundos
Caducidad 2 días 20-25 días Meses
¿Dónde encontrarla? Compra a particular Supermercado, en la zona de refrigerados Supermercado

 

VEREDICTO

Desde el punto de vista nutricional no existe una diferencia significativa, eso sí, ambos procesos presentan pérdidas de en torno al 20% de las vitaminas que contiene la leche. Aunque hay algunas vitaminas, sobre todo las del grupo B, que pueden verse más reducidas con el tratamiento UHT, muchas marcas enriquecen la leche devolviéndoles sus vitaminas, minerales y en algunos casos otros nutrientes consiguiendo una leche más enriquecida.

En conclusión, las únicas diferencias entre la leche fresca y la UHT están en el sabor y ¡en el precio!

Por tanto, la leche fresca se perfila como la idónea para los que son devotos de la leche y además quieren conservar el sabor original. La leche fresca es la que más nos acerca a esa experiencia de disfrutar de la leche recién ordeñada de la vaca (si alguien hoy en día aún lo recuerda). Eso sí, a un precio algo más elevado y obligados a un consumo más rápido.