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Se puede dar el caso incluso de lactantes que, sin tener ningún problema, están una semana sin evacuar (y no están estreñidos) o de personas que habitualmente defecan dos veces al día y cuando se estriñen pueden pasar dos días sin ir al baño. Si la persona no tiene molestias y no ha vaciado a su ritmo normal no tiene por qué estar estreñida. Pero cuando el mal aprieta o tienes tendencia al estreñimiento te recomendamos que recurras a estas 6 soluciones.
1 Lubrícate
Una cucharada de aceite de oliva en ayunas tiene un efecto lubricante a nivel intestinal y facilita el tránsito
2 Empina el “coco”
Pero sólo con agua o zumos naturales. Asegúrate de que ya has hecho la digestión y oblígate a beber entre comidas
3 Acostúmbrate a las verduras
Prepáralas hervidas, al vapor o tómalas crudas (en ensalada). Tienen gran cantidad de fibra. Las carnes tienden a bloquear con más facilidad tu intestino.
4 Mejor que sean ácidos
Los zumos de los cítricos (naranja, limón, pomelo…) son los mejores para “limpiar las cañerías"). Si los tomas en ayunas funcionan mejor
5 Desécala
La fruta deshidratada es muy rica en fibra. Es una magnífica forma de aportar energía a media mañana o a media tarde a la vez que cuidas la salud de tu intestino.
6 Integral ante todo
Los productos integrales conservan mejor las vitaminas, minerales y fibra que los que no lo son. Cuando hagas la compra busca la mayor parte de alimentos integrales posible.