Historias como esta hacen grande nuestro deporte. Durante la disputa del Medio Maratón de Granollers el atleta invidente Enrique Ortega se encontró ante una situación comprometida: era el kilómetro 18 y su guía no podía continuar. Fue entonces cuando dos corredores anónimos, Alberto López y Jesús de Miguel, decidieron ayudarle a continuar y finalizar la prueba.
“Cuando íbamos a adelantarlos el guía me pidió que ayudara a Enrique a terminar la prueba, ya que él no podía seguir. No me lo pensé ni un segundo”, explica Alberto López al portal web Soria Noticias, provincia de donde procede este corredor. Y no era una situación fácil, pues este debutante tuvo que renunciar a un mejor registro (entró en meta en 1:29:26) por ayudar de forma altruista a Ortega, que había salido mucho tiempo antes que ellos y su tiempo neto en meta fue de 1:38:04.
CURSO DE GUÍA EN CARRERA
En el momento en que decidieron ayudarle Ortega trató de explicar a los dos corredores cómo debían de guiarle e indicarle en carrera. Mientras uno se ató la cinta con la que mantener el contacto con el atleta, el otro iba avisando de posibles imprevistos. "Me adapté a su ritmo ya que iba un poco más lento”, cuenta López, uno de los tres protagonistas de esta maravillosa historia.
“El tiempo era lo de menos en ese momento”, explica un Alberto López que una vez cruzada la línea de meta acompañó junto a Jesús de Miguel al corredor invidente hasta el coche de su guía.