Sí, sí, has leído bien: la mala práctica deportiva es la que más debilita el suelo pélvico.
“Entre los factores etiológicos que provocan la I.U., se considera como la más importante el aumento de la presión intra abdominal, por la mala práctica deportiva o el ejercicio de abdominales mal realizado, situación que va a incidir sobre el suelo pélvico, provocando la degradación progresiva del mismo y haciéndolo incompetente para la función de continencia” Amlostegui, J.M. Pág. 644 (Archivos de Medicina del Deporte. Vol. XVI Núm. 74, 1999)
Correr es uno de los ejercicios que más aumenta la presión en la cavidad torácica y abdominal y, si además se hace sobre una cinta, el incremento de esa presión es exponencial, ya que el sistema de amortiguación que es bueno para las articulaciones, es muy hiperpresivo para la cavidad abdominal y torácica. De hecho, y citando de nuevo los Archivos de Medicina de Deporte, el 80% de las saltadoras de trampolín sufren I.U. El sistema de amortiguación de una cinta de correr es clavadito al de un trampolín. Ahí queda eso.
¿Y es tan malo ese aumento de presión? Imagínate o coge un globo y espachúrralo con una mano (además de ser muy pedagógico es muy desestresante este ejercicio) verás que se hunde donde tus dedos hacen presión y se expande donde no hay un refuerzo que lo evite. Pues bien, eso que ocurre con el globo es lo mismo que sufre nuestro abdomen cuando se aumenta la presión abdominal. La parte que se abomba y que se da de sí, en nuestro caso, es el periné y pierde tono muscular al hacerlo.
Bien es cierto que el mismo ejercicio en sujetos diferentes, no provoca aumentos de presión iguales. Dependerá mucho de lo competente que sea nuestra faja abdominal.
Infórmate sobre los cursos intensivos de abdominales hipopresivos de Moto Entrenadora en su página de facebook: facebook de Moto entrenadora y hipopresivos facebook su email: hipopresivos@yahoo.es. El método es difícil de aprender y es imprescindible aprenderlo con profesionales.
Más información sobre suelo pélvico y abdominales hipopresivos en nuestros atículos