Es un ejercicio simple pero a pesar de su sencillez sigue siendo uno de los mejores métodos de aislar y trabajar la musculatura abdominal, por eso se sigue recomendando en cada plan de puesta en forma. Además resulta fácil variar la intensidad, simplemente alejando o acercando los brazos del centro de gravedad del cuerpo (aproximadamente en el ombligo.)
- Básico, para principiantes:
No tienes más que tumbarte con las rodillas muy flexionadas, pies sobre el suelo. Pon las manos al lado de las sienes, sin tocarlas, y eleva el tronco hasta separar los hombros del suelo, no más arriba.
- Con rotación para intermedios:
Con los brazos extendidos , codos cerca de las orejas, comienza a elevarte y a la vez torsionas el tronco lateralmente, llevando los brazos hacia un lado de la cadera. Recupera la posición inicial y repite al lado contrario.
- Con sobrecarga, para avanzados:
Sujeta un balón medicinal con las manos de 3 a 5 kg, con una postura inicial similar a la anterior. Lleva el balón a las rodillas, sin separar más que los hombros del suelo.